El estadio deportivo sustentable más grande del mundo está en Taiwán, fue diseñado por el aquitecto japonés Toyo Ito y funciona 100% con energía solar.
Su forma en semiespiral que asemeja a un dragón es sólo una de las maravillas del gigantesco Estadio Nacional de Kaohsiung, en Taiwán, diseñado por el arquitecto japonés, Toyo Ito, que se especializa en crear construcciones sostenibles.
La mayor virtud de este estadio deportivo sustentable es que funciona ciento por ciento con energía solar. Con su extraordinario diseño, el cual es abierto, no solo marca un avance en las técnicas constructivas, sino que se diferencia de los demás estadios que tradicionalmente son cerrados.
Fue diseñado con el fin de cumplir todos los requerimientos para calificarlo como “edificio verde”, concepto que lo ha convertido en una obra impactante y ejemplar, incluso, para otros países.
Energía solar, la gran protagonista del estadio de Taiwán
La capacidad total es de 55 mil espectadores y el costo de su construcción fue de 150 millones de dólares. En el techo y sus paredes laterales exteriores están instalados 8,884 paneles solares que proporcionan la electricidad necesaria para el funcionamiento de todo el recinto.
En total, cubren una superficie de 14,155 m2, capaz de iluminar 3,300 luces en el estadio y dos pantallas jumbo que se encienden en sólo seis minutos.
Lo mejor es que también ilumina al barrio donde se encuentra el estadio deportivo sustentable. Esto significa que beneficia económicamente a sus habitantes, además de que reducen considerablemente la contaminación.
Aparte de los paneles, otra de sus cualidades amigables con el planeta, es que cuenta con 19 hectáreas de áreas verdes. Entre ellas hay siete con senderos para bicicletas y un bosque artificial en la parte posterior del estadio. Cuenta con varios parques y tiene también un estanque ecológico. ¡Y todo funciona con pura energía solar!
Como dato curioso, Taiwán es el mayor productor de turbinas de aire y paneles solares del planeta. No obstante, a pesar de sus logros en arquitectura sostenible como el Estadio Nacional de Kaohsiung, este país continúa construyendo plantas de carbón, con lo que demuestra que todavía hay un largo camino por recorrer en el sendero de las energías renovables.
También lee: Noruega, el primer país en enviar plan de acción climática a la ONU