En la Universidad de Acibadem, en Estambul, se desarrolló un enjuague bucal para detectar coronavirus capaz de recolectar saliva de una forma más cómoda.
Quienes se han sometido a pruebas para detectar el coronavirus han revelado que el test es realmente incómodo.
Ya que, para recolectar muestras de mucosas, un gran hisopo es llevado hasta el final de la nariz y garganta provocando arcadas e incluso que llores.
Una experiencia a la que nadie quiere someterse; pero necesaria para determinar si se tiene el virus.
Pero, afortunadamente, científicos han desarrollado un nuevo método para detectar el virus de una forma menos invasiva: enjuague bucal.
En la Universidad de Acibadem, en Estambul, se desarrolló un enjuague bucal que es capaz de recolectar saliva de la garganta de una forma más cómoda y que tendría resultados más efectivos que la prueba con hisopo.
Este nuevo test consiste en diluir una pastilla de un concentrado molecular en un tubo o vaso con agua.
Después dárselo al paciente quien tiene que hacer gárgaras para recoger una muestra de saliva de la garganta.
De acuerdo con Tanil Kocagöz, director del programa en la Universidad de Acibadem en Estambul, “los microorganismos se van a concentrar alrededor de las partículas de polímero (concentrado molecular)”.
“Sacamos la muestra con una jeringa y la introducimos en un test de Covid-19″.
Según los científicos, este método resultaría más efectivo, ya que mediante las gárgaras se recoge más cantidad de fluidos del paciente que mediante el raspado en nariz.
“Esta técnica nos permite usar las gárgaras en lugar de tomar muestras por la nariz para diagnosticar la Covid-19. Así la sensibilidad del test aumenta unas 20 veces”.
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Mayor protección del personal de salud
Además de que la prueba con gárgaras resultaría más eficaz y fácil de realizar, no expondría al personal de salud.
Cuando las enfermeras o técnicos de laboratorio realizan las pruebas actuales, deben tener contacto y cercanía con los pacientes.
Con en el enjuague bucal, el personal sólo manipularía los tubos con muestras, lo que reduciría el riesgo de contagio.
Aunque aún no se sabe cuándo se empleará este nuevo tipo de prueba en Turquía y el resto del mundo, se espera que sea utilizado en hospitales y aeropuertos.