Este criadero de ajolotes busca la preservación de la especie y además está abierto al público, así que podrás conocer todo sobre estos anfibios.
Desde hace 6 años, la casa de Néstor García se convirtió en uno de los santuarios más importantes de Hidalgo, para la conservación de ajolotes, la única especie de anfibios endémicos mexicanos en peligro de extinción.
Lo que empezó con solo una pareja de ajolotes, hoy contabiliza alrededor de 2 mil ejemplares, los cuales destacan por su color, variedad y tamaño.
En México, existen 17 especies que pueden vivir de 15 a 20 años, aunque hay ejemplares que se ha documentado que han vivido hasta 30 años, lo que comprueba que es un animal longevo.
El criadero de ajolotes más grande del mundo
El ajolotario Miquiztli Xolotl Pachuca, ubicado en la calle Amado Nervo, de la colonia Morelos, es el único criadero de esta especie en Hidalgo, misma que hasta hace unas décadas habitaban en todos los espejos del Valle de México.
Puedes visitarlo todos los sábados y asombrarte no solo con su belleza de innumerables colores, sino que conocerás la importancia en la cultura, gastronomía y hasta aplicación médica.
“La idea es informar sobre los cuidados para evitar que sigan muriéndose. Todo surgió por la necesidad de hacer conciencia ambiental a las personas, la importancia de conservar al ajolote y todo el sistema en el que vive. Tenemos que lograr su conservación y aquí tratamos de mantenerlos en las condiciones más cercanas a lo natural”, explica Néstor.
Los ajolotes son de la misma familia de las salamandras
Como dato curioso, es importante mencionar que todos los ajolotes son salamandras. Y que su cresta asemeja las plumas de Quetzalcóatl, como lo consideraban los ancestros.
La cuota de recuperación por visitante es de 60 pesos, tienes acceso al estanque y peceras para contemplarlos, mientras Néstor comparte su amplio conocimiento sobre los anfibios.
Con el dinero recaudado se da mantenimiento a las peceras y se compra comida, ya que los ajolotes son alimentados con una lombriz acuática especial que es traída desde Cuernavaca.
Néstor menciona que en ocasiones se puede adoptar a alguno de los ejemplares pequeños para llevarlos a casa y poder tenerlo como una mascota.
Puedes agendar tu visita al ajolotario por medio de la página de Facebook Ajolotario Miquiztli Xolotl o acudir directamente a las instalaciones.
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