El anuncio de Melinda y Bill Gates sobre su divorcio dejó a todo el mundo atónito. La buena noticia es que seguirán financiando las causas justas.
Pasa hasta en las mejores familias. Se trata del divorcio del año entre Bill y Melinda Gates, tras 27 años de casados, tres hijos y consolidar una fortuna de 130,500 millones de dólares.
El cofundador de Microsoft publicó en su cuenta de Twiiter que decidieron poner fin a su matrimonio porque ya no pueden crecer juntos como pareja. Encendiendo no sólo las redes sociales con esta noticia, sino al mundo bursátil.
Bill Gates, de 65 años, es la cuarta persona más rica del mundo, debajo de Bernard Arnault (LVMH), Elon Musk (Tesla y SpaceX) y Jeff Bezos (Amazon).
Por este motivo, todos han especulado qué pasará con la repartición de su fortuna, pues antes del divorcio, Bill y Melinda donaron alrededor de 50,000 millones de dólares a su fundación, la cual juega un papel fundamental en la familia.
Y es que el patrimonio neto de Bill Gates no está relacionado directamente con la empresa que cofundó. De hecho, actualmente sólo posee menos del 1.3% de las acciones en circulación.
Además, ambos se comprometieron a destinar 1,750 millones de dólares en dos años a la ayuda para paliar los efectos de la pandemia del Covid-19, y con el divorcio de Bill y Melinda Gates esta suma se podría elevar estrepitosamente, dicen los expertos.
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El divorcio de Melinda y Bill Gates deja muchas incógnitas financieras al aire
Esto no es todo, el matrimonio tiene numerosos negocios en común, así como diversos inmuebles. Entre ellos: la mansión en Seattle, conocida como Xanadú 2.0, cuya casa principal tiene más de 6 mil metros cuadros. Una finca ecuestre en California, otra más en Wellington, Florida. Una mansión frente al mar en Del Mar y un rancho en Wyoming.
Los Gates, poco antes de hacer este anuncio, transfirieron 20,000 millones de dólares de acciones de Microsoft a su fundación. La mayor organización caritativa privada del mundo y que desde su creación, en el año 2000, cuenta con 1,600 empleados. Además, Melinda y Bill Gates han invertido hasta hoy 53,800 millones de dólares.
“Continuaremos nuestro trabajo juntos en la fundación, pero ya no creemos que podamos crecer juntos como pareja en esta próxima fase de nuestras vidas”, anunció la pareja hace unas semanas.
Ahora la incógnita está en el aire, continuarán trabajando en sus labores altruistas, pero ¿cómo seguirán destinando sus recursos financieros a estas causas? Pronto lo sabremos.
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