Las fotografías de Jay Weinstein son un ejemplo de que la sonrisa no distingue culturas y saca lo mejor de nosotros. Mira sus conmovedoras imágenes.
Dicen que una sonrisa todo lo arregla, y a decir de estas fotografías de Jay Weinstein puede ser que la frase sea cierta. En 2013, el australiano creó el proyecto So I Asked Them To Smile (“Así que les pedí que sonrieran”), con el que demuestra cuánto podemos cambiar con sólo sonreír.
La idea surgió cuando, un día en la calle, en India, tomaba algunas fotos de paisaje, y en eso un hombre le pidió que le tomara una foto a él también. Han pasado ocho años desde entonces y Jay Weinstein ha tomado miles de fotografías como parte de su serie.
“Los retratos de so I Asked Them To Smile son de personas que no conocía antes de tomar la foto. Cada uno es el resultado de enfrentar mis miedos y de acercarme a un completo desconocido”, dijo el fotógrafo a My Modern Met.
¿Quién es el fotógrafo detrás de este proyecto?
Jay Weinstein ha vivido en India durante los últimos 25 años. Desde 2015, viaja por el mundo para reunir más fotografías y también dirige tours fotográficos, llamados A Wanderer’s Eye.
Su serie fotográfica So I Asked Them To Smile ha sido expuesta en Bombay, aunque continúa buscando las mejores sonrisas alrededor del mundo para plasmarlas en sorprendentes fotografías.
Desde la primera sonrisa, Jay Weinstein se dio cuenta de que todo, desde la postura de una persona hasta el brillo de sus ojos, cambia en cuanto sonríe. Y como prueba están sus fotografías.
“Me esfuerzo por crear imágenes auténticas, positivas y dignas. Lo último que quiero es que mis sujetos se arrepientan de sonreír para un desconocido con su cámara”, dice el artista.
Su proyecto trasciende las fronteras de género, clase, raza y nacionalidad. De hecho, parte de los hallazgos y reflexiones de Jay Weinstein y sus fotografías es que la sonrisa es universal y no distingue de culturas.
“La gente parece tener los mismos miedos, esperanzas, sueños y amor por sus hijos. Mi sonrisa obtuvo una reacción similar en cada comunidad que visité”, agrega Jay Weinstein.
La magia detrás de las fotografías de Jay Weinstein
Lo que más sorprendió a Jay Weinstein fue lo parecidos y cariñosos que somos, mucho más de lo que se nos dice constantemente. En su opinión, la sonrisa se ha convertido en un símbolo profundo de nuestra unidad, un superpoder que todos tenemos y que preferimos ocultar.
A raíz de reflexionar sobre sus fotografías, Jay Weinstein piensa que las soluciones globales para varios de nuestros problemas deben partir del reconocimiento de nuestras similitudes, y no de nuestras diferencias.
“Mi esperanza es que este proyecto pueda contribuir a recordarnos y reforzar estos fundamentos amorosos”, concluye Jay Weinstein sobre sus magníficas fotografías que, de sólo verlas, a uno le dan ganas de sonreír también.
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