Si no has reflexionado y solo piensas en obtener ese objeto, probablemente estás ante una compra por impulso que te generará deudas y estrés.
Luego de que El Buen Fin se extendiera por dos semanas, nos quedó claro que evitar compras por impulso es muy difícil. Y más, en pandemia. Y si bien las épocas de ofertas son tentadoras para, en apariencia, ahorrar, sin querer, nos llevan a gastarnos más de lo que tenemos y terminar endeudados.
Para evitar compras por impulso lo primero que debes entender es qué son. Si no has reflexionado y solo piensas en obtener ese objeto, probablemente estás ante una compra compulsiva. Desde la Procuraduría Federal del Consumidor nos alientan a hacernos una serie de preguntas para no caer en la tentación: ¿Esta compra va a mejorar tu vida de alguna manera importante?, ¿se supone que esta compra te hará sentir mejor?
El estrés laboral, la pandemia, los grandes descuentos, la cantidad de publicidad digital a la que estamos expuestos, los influencers mostrando productos que los hacen tan felices… Todo abona a que realmente creas que necesitas comprar ese objeto. Y sino, está el tan temible “yo me lo merezco porque trabajo mucho”.
Antes de sacar la tarjeta porque te lo mereces, haz el siguiente ejercicio: calcula el costo de ese objeto en horas de trabajo. ¿De verdad ese objeto merece 15 días enteros de tu trabajo?
¿Las compras me hacen más feliz?
Aunque creas que salir de compras es la mejor terapia, la realidad es otra. Diversos estudios señalan que ir de compras no te hará más feliz. Desde la Profeco se señala el estudio Efectos en los estados de ánimo de los consumidores por compras por impulso. En él se concluye que “si alguien está deprimido, frustrado o aburrido, comprar impulsivamente parece ser una táctica efectiva para sentirse mejor. Sin embargo, después de la compra, los estados de ánimo no son uniformemente positivos”.
Por ello, y lo mejor para evitar compras por impulso es seguir estos sencillos pasos:
- Pregúntate si realmente lo necesitas.
- Conoce cuántas horas de trabajo debes emplear para comprarlo.
- ¿Estás llenando algún vacío con esta compra?
- Una vez más: ¿lo quieres o lo necesitas?
- Tómate mínimo 10 minutos de reflexión antes de comprar nada.
- Si realmente lo quieres, pero es un capricho: haz un plan para comprarlo sin que afecte a tus finanzas.
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