5 técnicas para darse un automasaje relajante y efectivo

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5 técnicas para darse un automasaje relajante y efectivo

Nada mejor que empezar el día (o terminarlo) con un automasaje relajante que te liberará de tensiones musculares y del implacable estrés.

Aprender a relajarse con técnicas de respiración o meditación puede servirnos para liberar el estrés. Pero, ¿qué pasa con nuestro cuerpo? ¿Con cada músculo que ha estado tenso durante el trabajo o expuesto a demasiado ejercicio? Definitivamente, un masaje relajante sería la solución.

Y ya sea por falta de tiempo o porque nuestro bolsillo sigue golpeado desde la cuesta de enero, es complicado encontrar al fisioterapeuta ideal que nos ayude a recuperar la vitalidad de nuestro cuerpo, a través de un reconfortante masaje.

¡No te preocupes! Para eso estamos nosotros. Te queremos enlistar algunas técnicas efectivas para darse un automasaje relajante que libere tensiones y te haga sentir más ligero. Y sí, ¡lo puedes hacer tú mismo!

Lo primero es definir la zona a tratar. Normalmente, la mayor parte de la tensión se acumula en hombros, cuello y cabeza. Empecemos por ahí.

Tres puntos de presión

1. Cabeza

Coloca los dedos de la dos manos en la frente, dejando que se toquen entre sí en el medio de la cabeza con los pulgares descansando en tu sien. Presiona suave, pero firme en la frente. Poco a poco, cambia los dedos hacia la línea de crecimiento del cabello y presiona cada vez. Una vez llegues a la base del cráneo, retrocede a la frente de nuevo. Si no tienes tiempo para completar la rutina entera, usa dos dedos para masajear el punto donde se encuentra el cuello y el cráneo, durante unos 20 segundos.

2. Oreja

Toma un hisopo de algodón, un lápiz o tus dedos para masajear justo por encima de la abertura del conducto auditivo externo, haciendo respiraciones profundas y lentas a medida que vayas masajeándote. Cuando inhales, mira a tu izquierda y cuando exhales, mira a tu derecha. Presta atención a cómo notas tu cuerpo, ya que empezará a calmarse. Si responde bien a los masajes de puntos de presión del oído, repite la rutina del masaje del oído cada noche antes de acostarte.

3. Pecho

Usa tres dedos para masajear el esternón ejerciendo una fuerte presión para conectar con el dolor o la opresión. También puedes optar por poner un dedo para presionar la zona mientras respiras profundamente. Necesitas masajear la zona por completo de dos a tres minutos para experimentar sus efectos completos. Si sufres de estrés crónico, considera masajear el punto de presión del esternón y el punto de presión entre las cejas de forma simultánea.

4. Automasaje con rodillo de espuma

Este tipo de masaje, técnicamente llamado liberación miofascial con rodillo es lo más parecido a recibir un masaje por una tercera persona. Obviamente, no es lo mismo, ya que somos nosotros los que nos tenemos que ir moviendo y habrá algunas zonas a las que no lleguemos, pero es la manera en la que más nos acercaremos.

¿Cómo darse un automasaje con rodillo?

El masaje con el rodillo de espuma se trata, básicamente, de colocarlo debajo de nosotros e ir rodando nuestro cuerpo sobre él. Esto hace que al caer el peso de nuestro cuerpo sobre el rodillo, éste presione en nuestras estructuras ayudando a relajarlas si lo hacemos bien.

Beneficios del masaje con rodillo

  • Mejora la flexibilidad
  • Te recuperas más rápido
  • Mejora el rendimiento muscular

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5. Masajea tu cuello y hombros 

Masajear tu cuello y hombros ayudará a aliviar los dolores de cabeza. Utiliza tu mano izquierda para masajear tu hombro izquierdo y la misma mano para masajear el derecho. Suave pero firmemente, dibuja pequeños círculos con tus dedos, comenzando en la base del cráneo y acercándote a los hombros.

Cuando sientas un nudo, trabájalo en pequeños círculos en el sentido de las agujas del reloj y también en el sentido contrario. Te compartimos algunas técnicas que puedes usar:

  • Coloca tus manos en puño y suavemente frota tu columna dibujando círculos.
  • Coloca las puntas de tus dedos en tus orejas y suavemente deslízalas hasta que tus manos se reencuentren en el mentón.
  • Después de haber trabajado los nudos, estira los músculos de tus hombros, abrazándote.

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Después de realizar estas simples técnicas de automasaje relajante, toma unos minutos para respirar y poco a poco reintégrate a tus actividades. Recuerda que lo mejor es hacerlo antes de irte a dormir.

Ya nos contarás cómo te fue en tu primera sesión…