El uso de animales como medio recreativo se ha llevado a cabo desde tiempos ancestrales. Pero ahora sustituyen a los caballos por carruajes eléctricos.
De acuerdo con PETA Latino, cada año la lista de accidentes de caballos que tiran de carruajes ha aumentado, sin olvidar el sufrimiento y el maltrato del que son víctimas por esta práctica ya bastante obsoleta.
Afortunadamente, las iniciativas en pro del medio ambiente y los animales también incrementan. Como la creación de carruajes eléctricos que sustituyen a los caballos o a otras especies.
Claro ejemplo es lo que se está haciendo en República Dominicana. En donde los carruajes coloniales poseen una nueva ingeniería eléctrica. Concebida por el ingeniero industrial Livio Muzzolini, en conjunto con la abogada María Laura Dietsch Castillo, propietarios de la empresa “Andando”, desarrollaron este fascinante proyecto.
Estos carruajes eléctricos, cuyo valor aproximado es de siete mil dólares, incluyen bocinas, luces fijas e intermitentes, pedales y controles de mando y reversa.
Objetivos: acabar con el maltrato animal y disminuir la contaminación
La readecuación de los carruajes eléctricos que sustituyen a los caballos, para esta idea realizada con la Alcaldía del Distrito Nacional, duró alrededor de tres semanas. Utilizaron piezas antiguas para mantener y respetar su estructura original.
La velocidad promedio de cada carruaje es de 10 a 15 kilómetros por hora, gracias a dos baterías de 110 voltios colocados en la parte trasera. Las cuales tienen una durabilidad de hasta 50 kilómetros y se cargan en cualquier interruptor que tenga dicho voltaje.
La ventaja de este tipo de innovaciones es que no habrá maltrato animal ni emisiones de gases. Además, su costo operativo es bajo, ya que sólo requiere un cambio de aceite para los frenos una vez al año.
Asimismo, para fortalecer el turismo contarán con grabaciones de audio en varios idiomas. Y audífonos en cada uno de los carruajes, para que los usuarios conozcan la historia del lugar que visitan.
Cabe recordar que esta iniciativa también ha sido planteada en Nueva York, en sustitución de los caballos que pasean por el famoso Central Park y sus alrededores. Sin embargo, no se ha avanzado en el tema por la pandemia del coronavirus.
Por lo pronto, esperamos que en pocos años los carruajes eléctricos se pongan en marcha alrededor del mundo. Esto con la intención de disminuir tanto el maltrato animal como la contaminación en las grandes ciudades.
No cabe duda que más y más gente se une para fomentar un cambio positivo en el desarrollo ambiental y económico del planeta.
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