Si conoces alguien que sobrevivió al cáncer, debes saber que lo primordial para recomenzar es ¡mejorar los hábitos alimenticios!
El cáncer es una de las enfermedades más agresivas que una persona puede afrontar. Para los pacientes que ganaron la batalla, valorar y disfrutar la vida es una de sus prioridades después de tanto luchar, pero generalmente después del tratamiento y la recuperación adoptan una dieta con hábitos negativos, en comparación con muchas personas que no han tenido el padecimiento.
Científicos de la Universidad de Tufts, en Boston, realizaron una investigación con mil 533 sobrevivientes de cáncer y 3 mil 75 personas que no han padecido esta enfermedad. El estudio comparó el consumo dietético de ambos sectores, y el resultado arrojó que las personas que han padecido dicho cáncer ingieren cantidades menores de vitaminas, fibras, potasio, entre otros alimentos, a diferencia del sector opuesto.
El epidemiólogo de la Universidad de Tufts, Fang Fan Zhang, otorgó estos desórdenes alimenticios en cierto porcentaje al tratamiento contra el cáncer. Ya que afirma que los sabores, antojos y sensaciones en los alimentos se modifican tras los procedimientos y que estos efectos secundarios persisten por un largo periodo de tiempo.
La vida después del cáncer
Consejos para volver a comer saludablemente
Aunque la comida saludable por sí misma no puede prevenir que regrese el cáncer, sí lograría ayudar a recuperar las fuerzas y el ánimo. Asimismo, a reconstruir los tejidos y mejorar el organismo después de terminado el tratamiento. Aquí recomendamos a los sobrevivientes de cáncer, algunas formas de comer saludablemente.
- Prepara comidas sencillas que te gusten y sean fáciles de hacer.
- Cocina dos o tres platillos a la vez. Congela los platillos adicionales para comerlos otro día.
- Súrtete de acompañamientos congelados para que tengas más opciones.
- Simplifica las tareas para cocinar: compra verduras ya cortadas.
- Come alimentos diferentes. No hay un solo alimento que contenga todas las vitaminas y nutrientes necesarios.
- Incluye muchas frutas y verduras, tanto crudas como cocidas. Y frutas y jugos. Todas tienen vitaminas, minerales y fibra.
- Come pan integral de trigo, avena, arroz, o granos y cereales enteros. Estos alimentos tienen los hidratos de carbono complejos, las vitaminas, minerales y fibra que se necesitan.
- Añade frijoles, chícharos y lentejas a tu dieta, y cómelos con frecuencia.
- Controla el consumo de grasa, sal, azúcar, alcohol, alimentos ahumados o en escabeche y carnes procesadas.
- Come porciones pequeñas de carne magra y de pollo sin pellejo.
- Limita la carne roja.
- Haz ejercicio
Con estos consejos, verás como poco a poco el cuerpo y el ánimo se van recuperando. Y ojo: nunca dejes de consultar a tu doctor de cabecera.
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