Creados para controlar la maleza y eliminar las plantas malas, los herbicidas son sumamente dañinos para la salud humana y letales para la biodiversidad.
La labor de polinización que realizan las abejas y otras especies como las mariposas, los murciélagos y los colibríes, es de vital importancia para la producción de alimentos en el mundo. Así como para la salvaguarda de la biodiversidad, de ahí que las campañas para protegerlos cobren más fuerza.
Un nuevo estudio muestra que el glifosato, uno de los herbicidas más comunes, es causante de la muerte de las abejas. Y, por si fuera poco, de la maleza. Es sospechoso de ser cancerígeno en los humanos, por lo que ha sido prohibido en México gracias al gobierno federal.
“Celebramos este paso histórico. Porque el futuro de la agricultura pasa por el cultivo sostenible, la protección de la biodiversidad, los agroecosistemas y la fertilidad del suelo”, expresó la organización ecologista Greenpeace.
Muchos mexicanos apenas nos dimos cuenta del decreto, que se publicó en la Gaceta de Leyes Federales. Sin embargo, desde el punto de vista de los ecologistas, este podría ser el comienzo de una contrarrevolución verde.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador anunció en ella la prohibición gradual del maíz transgénico y del herbicida más dañino para el planeta: el glifosato. Esto, en un lapso no menor de 2 años.
México se pone así en sintonía con la Unión Europea, en donde el herbicida también será retirado de circulación, a partir de principios de 2023.
¿Qué es el glifosato?
Es un herbicida de amplio espectro dañino para el planeta, desarrollado para eliminación de hierbas y de arbustos, en especial los perennes. Es absorbido por las hojas y no por las raíces. Se puede aplicar a las hojas, inyectarse a troncos y tallos, o pulverizarse a tocones como herbicida forestal.
El activo químico evita que la planta afectada produzca proteínas necesarias para su crecimiento, lo que la conduce finalmente a la muerte.
¿Por qué es cancerígeno?
En 2015, la Organización Mundial de la Salud (OMS), clasificó el glifosato como “probablemente cancerígeno para los seres humanos”, basándose en una fuerte evidencia de que es cancerígeno para los animales. También se sospecha que actúa como un disruptor endocrino y que es tóxico para la reproducción.
¿Quién inventó el herbicida?
Fue el científico John Franz, quien en la década de los 70 trabajaba en la compañía Monsanto, en Estados Unidos.
Al menos el gobierno federal de México ha hecho conciencia sobre el uso del herbicida más dañino para el planeta. Y por lo tanto sumamos un granito de arena para proteger al medio ambiente.
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