Si los líderes internacionales del mundo tomaran buenas decisiones en favor del medio ambiente, otro panorama social nos pintaría.
El profesor Klaus Schwab fundador del Foro Económico Mundial “WEF”, en colaboración con Thierry Malleret publicaron este mes el libro “La gran narrativa” basado en la pregunta: ¿Cómo podemos crear un futuro más resiliente, inclusivo y sostenible después del Covid-19? Este libro pretende ser una guía que busca comprender mejor cómo ha evolucionado el mundo desde que comenzó la pandemia, a través de soluciones más resilientes, equitativas y sostenibles.
El libro contiene evidencia científica, y comprende 50 conversaciones que tuvieron lugar con los principales pensadores, y formadores de opinión a nivel mundial que representan una variedad de disciplinas académicas y puntos de vista. Lo cual lo convierte en un documento realmente multisectorial.
Para cada problema, una solución
“La Gran Narrativa” resume la visión de Davos y explora cómo podemos dar forma a una narrativa común y constructiva para el futuro. El libro es la segunda entrega de la serie “El Gran Reinicio”, que ha sido un éxito mundial y una gran lectura que ampliamente recomiendo.
El libro reconoce los problemas para los que colectivamente debemos encontrar soluciones. Abundan los temas vitales: económicos, ambientales, geopolíticos, sociales y tecnológicos, ofreciendo soluciones reales y a nuestro alcance.
La Gran Narrativa, entonces, propone historias esperanzadoras e inspiradoras entre las que destacan:
- El rechazo a la negatividad que impregna demasiadas narrativas del fin del mundo, listas para consignarnos a un futuro del olvido. Afirma que prevalecerán la creatividad humana, el ingenio y la sociabilidad innata, y ofrece un marco integral para explicar porqué.
- Propone soluciones para hacer del mundo un lugar mejor. Más resistente, más equitativo y más sostenible, lo cual depende de nuestra voluntad de implementar un cambio positivo.
Frenar el cambio climático es la prioridad
- Señala que la degradación ambiental y el cambio climático dañan desproporcionadamente a los menos responsables de causarlo. Ya sea que se trate de países (el mundo rico frente a las naciones en desarrollo y emergentes), generaciones (los jóvenes y futuros frente a los viejos) o riqueza e ingresos (los más ricos) miembros de la sociedad frente a los demás. Este problema fundamental de asimetría exige soluciones justas y equitativas: la solución global es la “justicia climática”.
- Cada transición importante de un sistema a otro crea ganadores y perdedores. La transición energética y la lucha contra el cambio climático no son una excepción. A menos que se consideren cuestiones complejas de redistribución, las implicaciones del mercado laboral y la equidad en la elaboración de la política climática, la aceptación de los ciudadanos “que se preocupan más por el final del mes que por el fin del mundo”. (Digamos que es el leitmotiv del movimiento en Francia de los Gilets Jaunes). Esta desconexión temporal entre el dolor a corto plazo y las ganancias a largo plazo explica la prevalencia del síndrome “no en mi mandato” (NIMTOF) entre ciertos tomadores de decisiones.
- El liderazgo se trata de tomar decisiones duras y difíciles en circunstancias inciertas, pero la acción sobre el cambio climático es un desafío tan trascendental, con ramificaciones tan complejas, que puede ser “más fácil” para un líder político elegido por 5 años o un ejecutivo empresarial (cuyo tiempo en el top rara vez supera los 5 años) para esperar a que el próximo líder haga el trabajo duro.
- El cambio climático es ahora uno de los temas más polarizados políticamente en muchos países.
Basta de excesos
En este sentido, La Gran Narrativa nos invita a reflexionar cómo la falta de responsabilidad por la crisis climática derivada de los excesos en los consumos, inhabilita a la población en general a tomar cartas en el asunto. León Tolstoi escribió la famosa frase: “Todos piensan en cambiar el mundo, pero nadie piensa en cambiarse a sí mismo”.
Y si tan solo nos enfocáramos más a actuar en favor del planeta con acciones puntuales cada uno, generaríamos un efecto mariposa multiplicador para contribuir positivamente a favor del planeta. Y sobre todo al propio futuro de la humanidad en él.
Sobre el autor:
El Dr. Francisco Suárez Hernández es director General de AdeS para América Latina y Ex Presidente del Consejo del World Environment Center. Francisco es un apasionado de la sostenibilidad y fue el primer Latino en ser Presidente del Centro Mundial del Medio Ambiente 2015-2018 (WEC). En 2020, la junta directiva de WEC votó por unanimidad para elegirlo Director Emérito, en reconocimiento a sus muchos años de servicio dedicado. En el año 2020 fue reconocido como uno de los 100 Latinos más influyentes ante la crisis climática por la Organización Sachamama.
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