Llegó diciembre y con él la tradicional puesta del árbol de Navidad. Pero, ¿cuál es la mejor opción para cuidar el medio ambiente?
Llegó diciembre y con él la tradicional puesta del árbol de Navidad. Ahora bien, nos hemos pasado todo el año realizando prácticas en pro del medioambiente. ¿Qué debemos hacer ahora? En Wokii nos dimos a la tarea de investigar cuál de las tres opciones que existen es la mejor: comprar un árbol natural, alquilar o elegir uno de plástico.
Para ello, recurrimos a todo el conocimiento del equipo de Casa Botánica, quienes nos explicaron los pros y los contras de todo.
“El árbol natural solo es una opción ecológica si es de un bosque cercano a tu ciudad y si éste proviene de una plantación creada para ese propósito. Si tu árbol viene de Estados Unidos, Canadá o Alaska, la huella de carbono es tremenda“, explican Augusto y Andrés.
Si en tu caso estás pensando en alquilar un árbol de Navidad, debes saber que es una buena opción, pero desde Casa Botánica recuerdan que nos debemos comprometer a cuidarlo y ser conscientes del calor que generan nuestras luces navideñas. “Lo mejor es comprar luces LED para que el calor sea el mínimo y el árbol no resulte afectado“, dicen los expertos.
Por supuesto, no te olvides de que al alquilar un árbol de Navidad tendrás en tu hogar una planta viva y necesita los cuidados clásicos de agua, iluminación, humedad y temperatura adecuadas. Sino, tu árbol no sobrevivirá y nadie quiere que eso suceda.
Por último, la opción de plástico solo es viable si te comprometes a cuidarlo mucho y a reutilizarlo año tras año. Para reducir al máximo tu huella, debes reutilizarlo 10 veces más.
¿Y después de Navidad, qué hacer con tu árbol?
La Navidad, como siempre, llegará a su fin el 6 de enero. En ese momento te preguntarás… ¿y ahora qué hago con este árbol de Navidad? Si te decidiste por la opción de comprarlo natural, lo que debes hacer es llevarlo a un centro de acopio para que puedan convertirlo en triturado orgánico. Mismo que servirá para regenerar suelos.
Si decidiste alquilarlo y lo cuidaste como se debe, la compañía que te lo trajo se lo llevará y lo volverá a plantar. Y si te decantaste por la opción de plástico, toca guardarlo muy bien hasta el año que viene.
Te puede interesar también: Casa Botánica, el sueño de los amantes de las plantas
