Originario de la China milenaria, el árbol Kiri es famoso por ser clave en la lucha contra el cambio climático. Es capaz de absorver 10 veces más CO2.
Originario de la china milenaria, el Kiri se ha hecho famoso por ser pieza clave en la lucha contra el cambio climático. Su capacidad de absorción de CO2 es 10 veces mayor a la de cualquier otro árbol, produce también mayor cantidad de oxígeno y allá donde se asienta es capaz de purificar y fertilizar la tierra.
Su nombre científico es el de Paulownia tometosa y además de ser un auténtico pulmón para la Tierra, esta especie tarda muy poco tiempo en crecer (puede alcanzar los 27 metros fácilmente) y es capaz de resurgir de las cenizas. Una vez cortado, la capacidad de este árbol es tal que es capaz de regenerarse en varias ocasiones más.
Todas estas virtudes han hecho que no sean pocos los que creen que esta especie sea lo que necesitamos para luchar contra el cambio climático. Desafortunadamente, el Kiri tiene una gran desventaja. Allá donde se asienta se queda y muchos países lo han catalogado ya como especie invasora por lo que está estrictamente prohibido su cultivo.
Es decir, si no hay un control sobre la proliferación de esta especie, las consecuencias serían fatales y no habría forma de revertirlas porque el Kiri es capaz de arrasar con cualquier ecosistema en el que se encuentre al tener una facilidad de reproducción muy superior al resto de especies.
Revertir el cambio climático
Al conocer las virtudes y los peligros de esta especie, nos damos cuenta de que las soluciones para salvar al planeta no son mágicas. Si bien debemos encontrar grandes aliados en la naturaleza, la realidad es que somos nosotros la especie que más contamina en todo el planeta.
Por ello, para revertir el cambio climático nuestro foco debe centrarse en encontrar soluciones que generen un cambio radical en nuestras actividades. Especialmente en aquellas que están relacionadas con las actividades agrícolas, ganaderas y forestales. Sin olvidar, por supuesto, una reducción drástica en el uso de las energías fósiles para cualquier tipo de proceso industrial o doméstico. Solo así lograremos el cambio que tanto necesitamos para salvar nuestro planeta.
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