Todos hemos googleado nuestros síntomas, ¿a poco no? Pero, cuidado, hacerlo por cualquier cosita puede llevarnos a la cibercondría.
¿Te ha pasado? Estás en casa y empiezas a sentir un ligero malestar en la cabeza y aunque te preocupas, decides no visitar al médico y mejor consultar al ‘doctor Google‘.
Corres a tu celular y empiezas a buscar en internet todos los síntomas que tienes.
Lo buscas uno a uno por separado y luego, todos juntos para comparar los resultados.
El buscador analiza tus datos y te dice que posiblemente tienes migraña.
Pero esa respuesta no te complace, así que buscas más a fondo y exploras nuevos y posibles síntomas, hasta que Google arroja “tumor cerebral”.
La respuesta te impacta y te llena de ansiedad, así que regresas a Google y buscas médicos y posibles oncólogos que traten tu enfermedad.
Das por hecho que tienes un tumor; así que por fin te decides ir al médico. Él te dice que solo es una migraña, pero no, tú no quieres creerlo, porque ya lo buscaste en Google y estás seguro de que es un tumor, cuando en realidad no lo es…
Este caso es un claro ejemplo de cibercondría, una obsesión que se genera por la preocupación por la salud y las búsquedas en internet.
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¿Qué es la cibercondría?
De acuerdo con diversos portales, la cibercondría proviene de la hipocondría, que es la preocupación obsesiva por la salud, donde la persona está muy atenta a los cambios de su cuerpo e incluso puede exagerar síntomas reales o imaginarios.
En el caso de la cibercondría, es la combinación de esta obsesión por la salud y la necesidad de buscar la causa en internet.
Gracias al internet, estamos acostumbrados a obtener respuestas rápidas sobre cualquier cosa que queramos.
Así que cuando nos sentimos mal, es normal querer saber qué nos pasa de inmediato y por eso consultamos en Google.
Pero buscar los síntomas y padecimientos en los buscadores no siempre es una buena idea.
Se puede convertir en una obsesión, la cual puede causar ansiedad y pánico en las personas.
Y eso no es todo, quienes sufren cibercondría suelen autodiagnosticarse y no consultar al médico. Incluso, cuando visitan al médico, suelen no creer en su diagnóstico.
La cibercondría no es solo obsesionarse con la salud y los diagnósticos en internet, también representa una pérdida económica para los pacientes y para las instituciones de salud.
¿Cómo tratar la cibercondría?
Si tú o alguno de tus amigos sufre cibercondría, lo mejor es buscar ayuda profesional y visitar un psicólogo.
También se deben evitar las búsquedas de enfermedades y síntomas en internet. Y en su lugar, mejor acudir al médico.
Por otra parte, recomendamos que tampoco busques enfermedades o síntomas en las redes sociales, ya que el algoritmo hará que nos aparezcan búsquedas similares sin consultarlas. ¡Mucho cuidado!
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