Las primeras semanas tu cachorro es una ternura, pero con el paso del tiempo las travesuras aumentan y es muy probable que manifieste ansiedad por abandono.
Conforme avanza la vacunación contra el Covid-19, las probabilidades de que regresemos a las oficinas y dejemos de trabajar en casa también aumentan. Y, con ellas, la ansiedad que le genera a los cachorros el quedarse solos tras varios meses de confinamiento.
Bien, durante la pandemia decidiste adoptar a un cachorro y obviamente te has encariñado. Sin embargo, cuando sales un par de horas al trabajo o a cenar con los amigos, la ansiedad por separación invade a tu cachorro provocando que haga de las suyas mientras no estás.
Y es que aunque los perritos se adaptan más rápido a los cambios que los humanos, el hiperapego puede causarle cuadros de ansiedad, ¡aunque usted no lo crea!
El consen de la casa… pero no tanto
La ansiedad por separación se trata de una afección que puede iniciar poco antes de que el dueño se vaya de casa. O bien, cuando algo asusta al cachorro y se da cuenta de que se encuentra solo, entonces comienza a experimentar manifestaciones de pánico, que van desde jadeos, morder paredes o muebles hasta, en casos extremos, incontinencia.
Asimismo, suelen ladrar muy fuerte, vomitar sin razón aparente o lamer excesivamente sus patitas, llegando incluso a hacerse daño.
De acuerdo con los expertos, los cachorros que han sido separados de la camada antes de tiempo, así como los adoptados que proceden de albergues o que fueron recogidos de la calle, son los más afectados por la ansiedad por separación.
¿Qué hacer para controlar la ansiedad por separación?
Pero esto se puede controlar o en el mejor de los casos, evitar de la siguiente manera. Toma nota de algunos tips para desapegarlo de una forma más sutil.
- Deja la radio o el televisor encendidos para que se sienta acompañado.
- Aumenta los juegos o juguetes que promuevan la independencia.
- Dale su espacio aunque sea en otra habitación y no dejes que diariamente duerma contigo.
- Realiza con él paseos más largos y cansados antes de ir a trabajar.
- No le expliques que te vas, eso aumenta su nerviosismo, porque aunque no lo creas ¡sí entienden!
- Haz salidas cortas sin tu cachorro, como ir a la tienda, para que comprenda que vas a regresar y no lo estás abandonando.
- Al volver, no lo saludes efusivamente, pues te extrañará más.
- Déjalo en un lugar de la casa en el que se sienta seguro.
- Ponle a su alcance la comida y juguetes. Si no los encuentra, aumentará su ansiedad.
- No lo sobreconsientas porque desarrollará mayor apego.
Lo importante es adaptar poco a poco a los cachorros a su nueva condición, para que no sufran de ansiedad por separación cuando el regreso a las oficinas sea inevitable.
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