Los alimentos y bebidas fermentadas contienen vitaminas y otros compuestos benéficos que mantienen en equilibrio la microbiota intestinal.
Numerosos estudios médicos han probado las cualidades de los alimentos fermentados. Entre algunos de sus beneficios más conocidos, están el gran aporte de ácido fólico y vitamina B12, la mejora del sistema digestivo, inmunológico y nervioso.
Megan Rossi, mejor conocida como la “doctora de la salud intestinal” te recomienda incluir estos alimentos fermentados -que además están llenos de sabor- en tu dieta diaria.
Kéfir
Es probable que a este popular probiótico también lo conozcas como leche o yogur de búlgaros. Puede obtenerse a partir de la fermentación de estos nódulos en leche o agua azucarada. Por el tipo de fermentación (lacto-alcohólica) el Kéfir posee una mayor variedad de microorganismos, muchos más que los del yogur tradicional y no contiene lactosa.
Además de los beneficios a la salud intestinal, este fermento aumenta las defensas del cuerpo y aporta calcio, proteína y vitamina B12. Puedes encontrarlo en algunos supermercados o prepararlo en casa.
Sauerkraut, chucrut o col agria
Este famoso platillo, oriundo de Europa central, se obtiene a partir de la fermentación láctica de las hojas frescas de col. La preparación es muy fácil y sólo requiere agua y sal. En muchos restaurantes alemanes se utiliza para acompañar las salchichas, pero ten mucho cuidado, a veces pueden ofrecerte solo col bañada con vinagre.
La col agria es rica en vitaminas C, A y B, y minerales como el fósforo y el potasio. Su alto contenido de enzimas, lactobacilos y ácido láctico favorece la digestión y el equilibrio de la microbiota intestinal. Además, posee propiedades vasoactivas, lo que favorece al sistema circulatorio.
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Kimchi
Como condimento icónico de la cultura coreana, este alimento fermentado se ha añadido a la lista del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO. Se dice que esta bomba de sabor es el secreto detrás de las saludable y longeva vida de los coreanos.
El kimchi se obtiene a partir del fermento de la col china y a menudo se agregan ingredientes como los rábanos o pepinos. En este alimento aparecen nuevamente altas concentraciones de ácido láctico, Lactobacillus, vitamina C, A, B1 y B2; carotenos y calcio.
Según algunos estudios, el kimchi ha demostrado una fuerte actividad antagónica ante la Helicobacter Pylori, la bacteria responsable de inflamación gástrica (gastritis) y cáncer estomacal.
Kombucha
Al té de kombucha, una colonia de bacterias y levaduras, se le ha asociado con efectos milagrosos que no están respaldados por la ciencia. Sin embargo, este fermento sí contiene probióticos y vitaminas (B, A) benéficas para la salud digestiva e inmunitaria. Tómalo con moderación y elige preferentemente las opciones envasadas, así no tendrás ningún problema.
