Idolatrado por la mismísima Cleopatra, el Mar Muerto es también el mayor spa natural del planeta gracias a sus efectos curativos en sus aguas.
Si alguna vez necesitas los efectos curativos del Mar Muerto para regenerar tu piel debes viajar a Medio Oriente con la intención de encontrarte con él. Un paraíso de salud y belleza al que se le atribuyen innumerables propiedades curativas.
Se cree que es un santuario para la piel porque el agua del Mar Muerto no se parece a ningún otro. De hecho, contiene 21 minerales entre los que destacan el potasio, el magnesio y el calcio. Estos son reconocidos por los expertos debido a sus propiedades relajantes, hidratantes y beneficiosas para el sistema circulatorio.
Además del agua, el lodo también cuenta con propiedades sorprendentes. Y esto se debe a que los minerales del Mar Muerto se mezclan también con el lodo y al ser tan pequeños se introducen en nuestra piel ejerciendo una serie reconfortante de efectos curativos extraordinarios.
El lodo del Mar Muerto desintoxica e hidrata nuestra piel a tal punto que puedes notar cómo las estrías se van desvaneciendo o la celulitis disminuye. Aunque no es magia, se trata de una notable mejora en nuestra circulación sanguínea, de ahí que los resultados sean tan espectaculares.
El Mar Muerto en tu casa
Si bien algún día te darás una escapadita y podrás disfrutar in situ de la maravillosa experiencia que es visitar el lugar. Algunas firmas de belleza han podido introducir en sus productos los beneficios del Mar Muerto.
Tal es el caso de AHAVA. Una firma de cosméticos de origen israelí que presume de ser la única marca del mundo autorizada para extraer los elementos del Mar Muerto de una forma 100 por cien sustentable.
Además de haber conseguido retener los efectos curativos del lugar, AHAVA (que en hebreo significa amor) es una firma vegana que solo utiliza productos naturales. De hecho, toda la línea está libre de parabenos, petróleo, aceite mineral, o extractos vegetales genéticamente modificados.
Al mismo tiempo, todos sus empaques están hechos con productos reciclados. A México llegaron en 2018, y ya son todo un must en la rutina de belleza tanto de hombres como de mujeres. Se antoja probarlos, ¿no?
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