Cambiar las toallas o tampones por una copa menstrual podría ser beneficioso por razones de salud, ambientales y económicas.
- La copa menstrual ayuda a combatir la contaminación por plásticos
En promedio, las mujeres menstrúan 40 años por aproximadamente cinco días al mes, más de 2 mil días a lo largo de su vida. Se estima que para cubrir esta necesidad, utilizarán más de 11 mil tampones o toallas femeninas, muchos de los cuales están fabricados o contienen algún tipo de plástico no reciclable.
Así, anualmente se desechan más de 100 mil millones de estos productos en el mundo. Al no poder reutilizarse, éstos terminan en rellenos sanitarios o contaminando el océano y puede tomar de 500 a 800 años para su descomposición. Una buena parte es incinerada, liberando dióxido de carbono y otros gases tóxicos a la atmósfera. La copa menstrual, por otro lado, es reusable y tiene un tiempo de vida promedio de más de cinco años.
- Evita que químicos nocivos lleguen a tu cuerpo
Al ser considerados como “dispositivos médicos” por diferentes administraciones de salud alrededor del mundo, una de las más importantes la Food and Drug Administration (FDA) de los Estados Unidos, las toallas sanitarias y tampones no requieren revelar en sus etiquetas todos sus componentes. A menudo, estos productos están fabricados con materiales sintéticos potencialmente nocivos: petroquímicos encontrados en el plástico y pegamento en proporciones mayores a las de cuatro bolsas de plástico.
Muchos de ellos también contienen algodón, pulpa de madera y rayón no orgánicos, que generalmente son tratados con pesticidas y herbicidas como el diuron (Diurex o Gramocil por sus nombres comerciales). Estos agentes están catalogados por la OMS (Organización Mundial de la Salud) como carcinógenos y se les ha relacionado con enfermedades del sistema inmunológico y problemas reproductivos. La copa menstrual, en cambio, está fabricada a partir de silicón de grado quirúrgico y no libera ningún químico nocivo en el cuerpo.
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- Ahorra dinero
Aunque la inversión inicial de una copa menstrual ronda los 700 pesos mexicanos en promedio (35 dólares), considera que la menstruación estará presente varios años de tu vida. El gasto de una copa menstrual equivale al de cinco a seis meses de toallas y tampones, pero estará contigo por más de cinco años. Las matemáticas no nos dejarán mentir: en esos cinco años, una mujer invierte alrededor de 7 mil pesos (300 dólares) en tampones y toallas sanitarias.