Por más extraño que te suene, combinar unos minutos de siesta con una taza de café podría inyectarle un extra rush a tu día a día.
¿Una siesta con café? Suena contradictorio. Pero según algunos especialistas de sueño dicen que no es tan mala combinación como podríamos pensar. De hecho, nos ayudaría a tener un mejor descanso.
En dos estudios realizados por investigadores de la Universidad de Loughborough, en Reino Unido, se encontró que los participantes de una prueba que tomaban una siesta con café de 15 minutos tenían una cantidad menor de errores en un simulador de manejo, versus cuando sólo hacían una de las dos cosas (tomar café o una siesta).
Lo interesante de la investigación es que el “truco” tenía estos resultados positivos incluso si los sujetos no se dormían por completo. Y solo se quedaban ligeramente dormidos esos 15 minutos (como sólo recostarse un rato tratando de dormir).
Otra investigación, publicada en el diario Egonomics, también encontró que una siesta con cafeína era más efectiva en mantener la alerta nocturna y el desempeño, que sólo una siesta.
Asimismo, encontró que el grupo de sujetos al que se les dio la combinación de siesta y cafeína podían mantener la alerta y desempeño durante un periodo de 24 horas sin sueño.
Esto se respalda por otros estudios que han encontrado que tomando siestas a determinados momentos es posible funcionar, sin dormir más de 24 horas. Y bueno, si a esto le agregamos café, parece ser que la combinación es aún más poderosa.
Pon a prueba las siestas con café
No son los únicos estudios que han tratado de probar si la mezcla café + siesta es realmente efectiva. De hecho, otro estudio publicado en el diario Clinical Neurophysiology halló que era una forma efectiva para reducir el sueño.
Esta prueba también encontró que la mezcla de café con unos minutos de siesta mejora el nivel de desempeño durante al menos 1 hora después de hacerla. Algo que no sucede si sólo se toma café o si solo se toma una siesta.
Los entrevistados realizaron diversas pruebas de memoria en las que los que tomaron siesta con café se desempeñaron mejor que aquellos que sólo hacían una actividad.
Pero, ¿por qué sucede esto? De acuerdo con un trabajo publicado en el Journal of Alzheimers Disease, puede deberse al efecto que tienen ambas en la adenosina. Esto es un químico que impulsa el sueño y que aparece cuando nos sentimos cansados.
Cuando dormimos, los niveles de adenosina se reducen. Y cuando tomamos café, este compite con la adenosina por los receptores en el cerebro impidiendo que sientas el cansancio. Aunque no reduce la adenosina, no deja que se “conecte” al cerebro.
Todo dependerá del cansancio de la persona
Los expertos creen que beber café antes de una siesta tiene beneficios porque el cuerpo está reduciendo adenosina y eso hace que el café tenga menos adenosina con la cual “competir”.
Como se encontró en uno de los estudios, los efectos duraban más de una hora, aunque puede depender del cansancio de la persona.
Es importante mencionar que aún se deben realizar más estudios al respecto para entender realmente cómo funciona el cerebro con esta mezcla de siesta y café. Ahora ya sabes que esta contradictoria combinación puede ser de mucha ayuda cuando necesitemos ese extra en el día. ¿Te atreves?
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