El tiempo se acaba y si aún quieres hacer algo para salvar a nuestro planeta, ¡hay que actuar ya! Nuestra experta Jessica González Castro nos dice cómo…
El Día Internacional de la Tierra está por conmemorarse, y sería un buen momento para entender el equilibrio que necesitamos de la siguiente manera: una oportunidad global para dejar de lado nuestras diferencias y conocer la urgencia de salvar nuestro planeta.
Desde animales e insectos hasta bacterias y plantas, la Tierra alberga actualmente unos 8,7 millones de especies diferentes que forman los numerosos ecosistemas de los que depende la estabilidad de nuestro planeta.
Muy pocas personas logramos entender por qué las especies individuales, como las abejas, los lobos y los tiburones, son tan cruciales para los entornos en los que habitan. Pero cada especie, por pequeña que sea, tiene un importante papel que desempeñar en el impulso de la productividad de los ecosistemas y el mantenimiento de la vida en nuestro planeta.
La sexta extinción masiva de especies
Según un estudio realizado por científicos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la actividad humana está actualmente detrás de una de las mayores extinciones masivas de especies que ha visto el mundo. Lo que nos sitúa al borde del sexto evento de extinción masiva de la Tierra y amenaza la supervivencia de la civilización humana si no actuamos rápidamente. ¡Por eso la urgencia de salvar nuestro planeta!
Este estudio reveló que, solo en el último siglo, se han extinguido unas 477 especies diferentes debido al consumo excesivo de los seres humanos y a la destrucción de los hábitats naturales. No hay mejor día que hoy para abordar la amenaza a la que se enfrenta nuestro planeta y preguntarnos qué podemos hacer para ayudar.
La fauna silvestre está desapareciendo debido a actividades humanas como el cambio climático, la deforestación, la pérdida de hábitat, la sobrepesca, la agricultura insostenible y la contaminación.
No más deforestación
Los árboles desempeñan un papel vital en nuestra supervivencia al eliminar las emisiones nocivas de dióxido de carbono (CO2) de nuestra atmósfera. La deforestación causa un daño ambiental incalculable, tanto por la liberación de miles de toneladas de CO2 en el aire como por la extinción de miles de especies de vida cada año.
Mientras que el aceite de palma, la soja y la madera son también grandes impulsores de la deforestación, la tala de bosques para dar paso al ganado de pastoreo es responsable del 71% de la deforestación del Amazonas. Mientras que el 70% de toda la soja cultivada se destina a los animales que comemos.
Evitar la sobrepesca
Se calcula que cada año se capturan entre 0,97 y 2,7 billones de peces en la naturaleza y se matan en todo el mundo, y la mayoría de las empresas pesqueras. Nuestros océanos sostienen nuestro planeta regulando el clima y los niveles de oxígeno en nuestra atmósfera, y han sido un poderoso aliado contra el calentamiento global, absorbiendo el 93% del dióxido de carbono liberado por las actividades humanas.
Por eso, cuando el conservacionista marino Paul Watson declara que “si los océanos mueren, todos morimos”, no está bromeando. Así que recomendamos dejar la pesca fuera de tu plato si quieres ayudar a proteger los océanos y salvar nuestro planeta.
Joseph Poore, científico medioambiental de la Universidad de Oxford, ha calculado que solo con un cambio de dieta podríamos reducir nuestras emisiones globales de gases de efecto invernadero hasta en un 50%.
Todos los seres vivos que habitan en este planeta tienen un valor intrínseco y cada uno desempeña un papel único en la compleja red de la vida. Debemos trabajar para proteger las especies amenazadas, nuestro planeta, el océano, y a las futuras generaciones.
Si esta lectura te hace cuestionarte algunos hábitos, puedes acceder aquí para encontrar más información gratuita.
Sobre la autora
Jessica González Castro, autora de esta columna, es gerente de campaña en Million Dollar Vegan en México. Estudió la licenciatura en Administración de Empresas de Hospitalidad en la Universidad del Valle de México. Es fundadora del primer centro comunitario vegano en México, Casa Animal. Fundadora de Cocinar para Liberar, un proyecto que se encarga de que más negocios y hoteles tengan opciones a base de plantas en sus menús. Feminista Interseccional.
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