7 cosas que puedes hacer para salvar a las abejas

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7 cosas que puedes hacer para salvar a las abejas

No es necesario que te vuelvas apicultor para preservar a las abejas, con acciones simples pero concisas, puedes contribuir enormemente a salvarlas.

Como bien sabes, la abeja es el animal más importante del mundo y su función ecosistémica es imprescindible para los humanos. Sin embargo, debido a los pesticidas y la deforestación, el 90% de esta especie de insectos ha desaparecido, lo que pone a las abejas en grave peligro de extinción.

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Foto: Cortesía de Guerlain.

Según Greenpeace cada tres bocados de comida que damos, mínimo uno se lo debemos a las abejas. Tal es su importancia en el mundo. Por eso debemos combatir las causas que han provocado que esté en peligro de extinción.

Aquí una lista de 7 cosas sencillas que puedes hacer para salvar a las abejas:

1. Evita el uso de aerosoles, pesticidas o fertilizantes tóxicos. Si tienes jardín es mejor que no apliques productos químicos para preservar las raíces de las flores o del pasto.

Compra miel local

2. La miel local producida por apicultores cercanos conserva al máximo las vitaminas y otras propiedades de la miel. Esto ayuda el apicultor a cubrir los costos de la producción.

3. Si ves un enjambre cerca de tu casa, no lo tires ni le rocíes agua. Llama a una asociación dedicada a proteger las abejas, para que ellos se encarguen de llevar el enjambre a un lugar seguro y apto para ellas.

4. No hagas fogatas, ni enciendas fuego en los bosques. Son centenares las colmenas que se pierden todos los años debido a los incendios forestales, pero mayor es aún el daño medioambiental que producen.

Dales un hogar

5. Muchos aspirantes a apicultor, especialmente en las zonas urbanas, tienen dificultades para encontrar espacios para sus colmenas en lugares cercanos. Actualmente, existen varias organizaciones dedicadas a buscar terrenos o fincas en donde se puedan asentar colmenas. Debe haber una cerca de tu comunidad.

6. No contamines. No tires vidrio, latas ni cristales en jardines, plazas ni bosques. Las abejas se pueden intoxicar o dañar sus pequeñas patas cuando se encuentran en el proceso de polinización.

7. Educa a los más chiquitines. Los niños son una esponja de conocimiento y si desde muy pequeños les enseñas la importancia de las abejas y la polinización para el planeta, seguramente serán personas más conscientes y preocupas por protegerlas.

¡Salvar a las abejas de la extinción es nuestra responsabilidad!

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