Raúl Ramírez Lozano es un ex tenista mexicano que ha sido considerado, incluso, el mejor a nivel mundial; y esta columna es un homenaje a todas sus enseñanzas.
Esta columna va dedicada al 30 aniversario del Abierto Mexicano de Tenis y su homenaje a una leyenda sostenible del tenis mexicano: Raúl Ramírez Lozano.
Un gran amigo, papá, esposo, abuelo… de quien sus logros tenísticos siguen siendo motivo de orgullo en Ensenada y en todo México. Grandiosos resultados, como ser considerado el mejor tenista mexicano de la historia, llegando a estar situado como el 4to mejor jugador del mundo en singles y #1 en dobles por 62 semanas. Ganó 19 títulos en singles y 60 en dobles, incluidos los Masters de Roma (1975) y Montecarlo (1978). Y es el único mexicano que ha llegado a semifinales en singles en Wimbledon (1976).
Raúl Ramírez Lozano: Gran personaje, grandes hazañas
Desde niño desarrolló su capacidad para jugar tenis entre las canchas de Ensenada y San Diego en EUA. Fue becado y jugó tenis en la Universidad del Sur de California “USC” en Los Ángeles, California. Y fue nominado al equipo All American del tenis universitario de los Estados Unidos. Tiene el récord de haber finalizado en primer lugar tanto en singles como en dobles en 1976 en la lista del circuito de tenis Grand Prix Tennis Circuit. La gran hazaña de terminar número uno tanto en singles como en dobles es sobresaliente y no se ha logrado repetir desde entonces.
En la Copa Davis de 1975 en México como visitante en Palm Springs, California, le ganó al favorito, Estados Unidos, dando Raúl los 3 puntos para México, 2 de sencillos sobre Stan Smith y Roscoe Tanner. En dobles junto con Vicente Zarazúa frente a Bob Lutz y Dick Stockton.
Y para la Copa Davis de 1976, en diciembre de 1975, momento que todavía miles de mexicanos platican la gran historia, jugando en Ciudad de México, en el estadio del Deportivo Chapultepec, derrotó al equipo de Copa Davis de los Estados Unidos, encabezado por el número #1 del mundo en ese momento, Jimmy Connors. Y Brian Gottfried a quienes derrotó en singles y en dobles, haciendo pareja con Marcelo Lara frente Dick Stockton y Erik Van Dillen, terminando la serie 3-2 a favor de México.
Después de su retiro, fue Capitán del Equipo Mexicano de Copa Davis, Copa Federación, Equipo Olímpico Mexicano. Así como un destacado jugador del circuito de veteranos con triunfos como Roland Garros 2004, en la categoría “Leyendas del abierto”.
El honor de ser su amigo
La amistad con mi familia viene de generaciones de más de 70 años con abuelos, tíos y primos tenistas. He tenido el honor de ser su amigo y de su familia, empezando con su extraordinaria esposa, Maritza, ex-Miss Universo venezolana, y sus 3 hijos: Rebeca, Raúl y Daniel.
Desde que yo tenía 14 años, empezamos a compartir miles de horas entrenando en la cancha de tenis, donde le aprendí lo importante de la disciplina, dedicación, enfoque a metas, anticipación… Y literalmente algo que es imposible dominar como lo hacía Raul, vencer un ajedrez mental en jugadas y patrones de tenis, que fueron muchas de sus virtudes para obtener los increíbles resultados y la magia que logró en la cancha.
El último rival de Raúl
En estos últimos años Raúl Ramírez Lozano se ha enfrentado al último y más feroz competidor que es una enfermedad muy complicada: Parkinson. Cuenta con el tesoro de tener una gran esposa y familia para buscar dar todo el apoyo en su lucha contra la enfermedad. Por otro lado, ha tenido la fortuna de convertirse por primera vez en abuelo con el nacimiento de Raul IV y después su nieto Rodrigo, quienes le han inyectado una significativa dosis de vida.
Como es parte de todo ciclo humano, en el pasar de los años, cada partido, torneo, momento de felicidad como recibir a hijos y nietos, y hasta las adversidades, son las piezas de la vida, que van sumando a tu mochila de experiencias personales y profesionales. Podrás tener muchos títulos y reconocimientos, rankings, pero sin duda, para Raúl, el más grande de todos fue: conocer y casarse con el amor de su vida Maritza, sus hijos y por último conocer a sus nietos.
Honor a quien honor merece
Gracias al gran equipo del Abierto Mexicano de Tenis, organizaron este muy merecido momento, y viajaron a recibir el reconocimiento y aplausos sus hijos Rebeca y Raúl. Tuve el honor de presenciar este gran homenaje y estar con mi gran amigo Raúl, quien participó virtualmente en el evento desde Ensenada.
Te mando un fuerte abrazo partner y te quiero mucho. Así como te dice Maritza en la cancha “Bravo Capitán”. ¡Disfruta este momento y levanta esta última copa de aprecio y reconocimiento de toda la comunidad y familia tenística de América Latina y del mundo!
Como ensenadense, tenista, admirador, y amigo de Raúl Ramírez Lozano quiero dedicarle a él esta columna de la mano con el Abierto Mexicano de Tenis, como un homenaje al gran esfuerzo y dedicación que él y su familia han puesto para salir adelante en muchos logros; pero también en reveses, esperando que…
Cada vez más personas puedan ser inspiradas en el deporte como lo he sido yo a través de sus enseñanzas.
Sobre el autor:
El Dr. Francisco Suárez Hernández es Director de Asuntos Corporativos de FEMSA Negocios Estratégicos y Ex Presidente del Consejo del World Environment Center. Francisco es un apasionado de la sostenibilidad y fue el primer Latino en ser Presidente del Centro Mundial del Medio Ambiente 2015-2018 (WEC). En 2020, la junta directiva de WEC votó por unanimidad para elegirlo Director Emérito, en reconocimiento a sus muchos años de servicio dedicado. En el año 2020 fue reconocido como uno de los 100 Latinos más influyentes ante la crisis climática por la Organización Sachamama.
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