Empezamos el mes de julio con un tema que preocupa a todos: los graves daños que causan los plásticos. ¡Únete a la iniciativa y aprender a reciclarlos!
Ajá, te dejamos con el emoji de duda en la mente ¿verdad? Aunque seas muy responsable al separar los desechos, debes fijarte muy bien a la hora de reciclar los plásticos.
Cuidar al planeta y frenar el cambio climático es tarea de todos. Con pequeñas acciones podemos hacer mucho. Y ya que estás comprometido con ser un mejor ciudadano para el medio ambiente, debes saber que reciclar los plásticos no es una labor sencilla.
Solo el 18% del plástico en el mundo se recicla. Las botellas de plástico son los artículos que más se reciclan, pero otros, como los popotes, presentan más dificultades y suelen desecharse directamente en el mar.
Tú puedes aportar mucho de distintas maneras, desde evitar el consumo de plásticos, hasta separar botellas, frascos y envases, dependiendo del tipo de plásticos que hayas usado. Es decir, por categorías. De esta manera le harás la vida más fácil a las grandes fábricas que se dedican a reciclar plásticos.
Porque no es lo mismo reciclar un garrafón a un mueble de jardín o un juguete. Así que tranquilo, aquí estamos para hacerte la vida más sencilla. Solo toma nota de los plásticos que son más fáciles y más difíciles de reciclar para que empieces a separar como se debe.
Los más difíciles
Ten cuidado dónde tiras las fibras de nylon, biberones, discos compactos, envases para uso médico, piezas de coches o garrafas de fuentes de agua, pues son los plásticos más complicados a reciclar.
Por su parte, los vasos térmicos, recipiente para frutas, bandejas de comida, relleno para embalaje, envases de yogur, perchas y aislantes, tienen un grado de dificultad bastante alto.
¡Te vas a sorprender! Las tarjetas de crédito, marcos de puertas y ventanas, canalones, tuberías, revestimiento de cables y piel sintética, son plásticos súper difíciles de reciclar así que de preferencia no los tires a la basura. Hay sitios especiales para ello.
Los más fáciles
Como te decíamos, lo que más se recicla son las botellas de bebidas y es lo más fácil de reciclar. También los tarros de comida, fibras de ropa y de alfombras, algunos botes de champú y enjuagues bucales.
Botellas de detergente y de leche, envases de comida, cajas de almacenaje, juguetes, cubos, tiestos y muebles de jardín, están hechos con polietileno de alta densidad por ello facilita su reciclaje.
Papel film, bolsas de la compra, plástico de burbujas y aislantes de cableado, aunque poseen polietileno de baja densidad, también se reciclan fácilmente.
Por último, tapones de botellas, popotes, loncheras, neveras portátiles, fibras de tejidos y de alfombras, lonas y pañales, aunque tienen materiales demasiado rígidos no son plásticos difíciles de reciclar, pero toma tiempo.
¿Lo ves? Más que buscar la manera de cómo reciclar más fácilmente los plásticos, es vital que tengamos las ganas y el valor ¡de hacerlo!
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