El Pink Tax es el precio que las mujeres pagan por un artículo y que al ser comparado con su versión masculina nos damos cuenta de que es mayor.
También conocido como impuesto rosa, el Pink Tax es el precio que las mujeres pagan por un artículo y que al ser comparado con su versión masculina nos damos cuenta de que es mayor.
Sí, el ejemplo más claro son los rastrillos. El de ellos es azul oscuro, el de ellas es rosa. Y aunque son prácticamente iguales, el primero es más barato que el segundo.
Desafortunadamente, son muchos los productos a los que se añade un incremento en su precio final solo porque van dirigidos a mujeres. Esto sucede con la ropa, los productos de higiene como shampoos, desodorantes, toallitas de higiene, tampones, juguetes, artículos escolares…
Desde la más tierna infancia todos los artículos para niñas son más caros que los de los niños. ¿El motivo? Algunos dicen que la mercadotecnia y la misma Profeco señala que los productos para ellas requieren mayores inversiones debido a la gran competitividad que presenta el mercado porque las mujeres son las tomadoras de decisión.
Lo cierto es que nada más leer esta explicación del organismo mexicano nos damos cuenta de que no existe una justificación real, y lo único que tenemos es desigualdad. Este sobreprecio va en detrimento de la capacidad económica de las mujeres que ya está de por sí mermado en un mundo en el que los hombres reciben mayores salarios.
De ahí la importancia de exigir medidas regulatorias que eliminen el impuesto rosa. Y si no nos crees, siempre puedes consultar esta calculadora digital que te dirá cuánto ha gastado de más una mujer debido al pink tax dependiendo de su edad.
¿Qué podemos hacer con el impuesto rosa?
Desde axthepinktax.com se nos recomienda que alcemos la voz y compartamos cuánto hemos pagado de más por el simple hecho de ser mujeres. Y demostrar así lo absurdo de la situación.
Al mismo tiempo, invita tanto a hombres como a mujeres a compartir y denunciar a través de sus redes cada vez que vean este incremento en productos iguales. La idea es visibilizar para obligar tanto al sector público como a la iniciativa privada a regularizar precios de manera justa.
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