Después de ser diagnosticado con glaucoma, este perro golden retriever tuvo que ser operado y se quedó sin ojos. Pero ahora, tiene un guía.
Este perro ciego se apoyó en un adorable cachorro —también golden retriever— de solo ocho semanas para aprender a vivir con su ceguera.
Su dueña, Melanie Jackson, le contó al diario inglés Daily Mail la historia y ambos perritos se han hecho virales en Instagram. En la actualidad, la cuenta de Tao & Oko tiene ya más de 45,000 seguidores.
“A Tao le diagnosticaron glaucoma. Todo sucedió tan rápido. estaba bien por la mañana, pero por la noche negaba con la cabeza, lo que sugería que tenía dolor. ¡Cinco horas después, estaba ciego!“, señaló Melanie Jackson.
Una vez que eso sucedió, Tao, como perro ciego de 11 años, tuvo que aprender nuevas herramientas para desenvolverse con su nueva situación. Y aunque su dueña señala que estaba contento y poco a poco se iba adaptando, los dos sentían que faltaba algo.
Ese algo era Oko, que llegó al hogar con solo ocho semanas de vida. Desde el primer momento se hicieron inseparables. Jackson señala que Tao sigue a todos lados a Oko y que ambos duermen juntos. Aunque, señala, “estamos entrenando a Tao para que siga a Oko a todos lados, pero que esto no suponga ningún peligro para ninguno“.
A través de sus redes sociales podemos seguir disfrutando de esta bonita amistad:
¿Por qué los perros son buenos guías incluso para este perro ciego?
Curiosamente, los labradores son los mejores perros guías que existen. Esto se debe en parte a su carácter tranquilo y a que son muy inteligentes. Aunque también el pastor alemán también es un gran perro guía. Por supuesto, en ambos casos, deben ser entrenados para ello después del primer año de vida.
De hecho, su educación como perritos guía dura mínimo un año y medio y no todos los cachorros lo consiguen, ya que son muchos aprendizajes los que tienen que lograr.
En México existe Perros guía, una institución de Asistencia Privada fundada para educar, entrenar y donar perros guía, y dar rehabilitación inclusiva a personas ciegas. En ella los cachorros reciben todas las herramientas necesarias para cuidar y proteger a su dueño invidente como subir a transportes públicos, encontrar puertas, escaleras, banquetas, sillas, y tener un comportamiento ejemplar en lugares públicos
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