La reunión entre Jackman y Reynolds tuvo una buena causa: además de hacer reír a los espectadores, reunir fondos para luchar contra el coronavirus.
El pasado sábado se llevó a cabo el concierto en línea Global Goal: reunite for our future, donde famosos como Miley Cyrus y los integrantes de Coldplay interpretaron canciones desde su casa para mostrar su apoyo ante la pandemia de coronavirus. En ese contexto tuvo lugar una videollamada “casual” entre los protagonistas de la saga de X-Men, entre ellos Hugh Jackman.
El actor de The Greatest Showman estuvo acompañado por Sir Patrick Stewart, Halle Berry, Sophie Turner y James McVoy, entre otras celebridades de la famosa saga. Todos ellos se encontraron en línea para reunir fondos contra la pobreza extrema, la cual provoca que el contagio de covid-19 sea aún más riesgoso.
Todo iba bien en la llamada casual, hasta que otro famoso decidió unirse “sin haber sido convocado”. Hablamos de Ryan Reynolds, protagonista del antihéroe Deadpool, que nos ha hecho llorar de risa con sus películas.
El carácter divertido e improvisado del marido de Blake Lively provocó las carcajadas de todos los participantes, y la alegría fue contagiada a los espectadores.
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Hugh Jackman fue quien se puso nostálgico con el encuentro entre amigos. “Honestamente, es algo surrealista, no puedo creer que hayan pasado 20 años desde la primera película de X-Men”, dijo.
Jackman, el más emotivo
Luego de las risas, Jackman dedicó unas palabras a las víctimas del coronavirus y al movimiento Black Lives Matter: “En algún momento en un futuro no muy lejano, el arduo trabajo de todos los ciudadanos del mundo dará lugar a un mundo más saludable, seguro y equitativo. A todos los sanitarios, trabajadores esenciales y aquellos que luchan por la justicia racial: admiro sus esfuerzos y les apoyo”, dijo.
Sin duda, ver a nuestros superhéroes favoritos reunidos y platicando de manera casual, como simples mortales, ha sido uno de los momentos más alentadores en estos tiempos. Y lo más bonito de todo: ellos también reconocen que, hoy en día, los verdaderos superhéroes son los trabajadores de la salud.