El nacimiento de un bebé siempre supone alegría, pero esta cría de hipopótamo nacida en el Estado de México ha hecho encoger nuestro corazón.
El nacimiento de un bebé siempre supone alegría, pero esta cría de hipopótamo ha hecho encoger nuestro corazón.
Se trata de un pequeño mamífero de la especie hipopótamo del Nilo que vio la luz en el Parque Ecológico Zacango en el Estado de México tras pasar ocho meses en el vientre de su madre.
Con tan solo 8 días de nacido, los expertos del parque trabajan sin descanso para salvar a esta bonita cría que sería el cuarto hijo de Tamba, una hipopótamo que también nació dentro del parque y que ha tenido tres crías más, pero desafortunadamente han muerto.
Desde el parque los expertos cuidadores han señalado que tienen grandes esperanzas para el futuro de este bebé. “Su estado ahorita es estable aparentemente, ya que se le ha observado junto a la mamá, van a todos lados juntos, entran al agua, salen a comer y los últimos días hemos visto que el ejemplar se observa aparentemente bien”, explicó Juliana Leal Nieves, Médico del área Clínica, Parque Ecológico Zacango.
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Tanto Tamba como su pequeña cría no están solos. En el parque ecológico también viven dos ejemplares adultos de hipopótamo del Nilo más, Gloria, de 41 años, y Mundo, de 43 años.
Hasta el momento, se desconoce el sexo del bebé de Tamba porque mamá y cría permanecen todo el tiempo juntos. Situación ideal para que el pequeño o la pequeña hipopótamo sobreviva. Des afortunadamente, los datos juegan en su contra: se han dado alrededor de 20 nacimientos de esta especie dentro del parque, y solo Tamba ha sobrevivido. Las bajas temperaturas de que se producen en invierno y los más de 2800 msnnm de altura no ayudan a la proliferación de esta especie.
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Junto a ellos se encuentran también en el parque otras tres especies de megavertebrado: Jirafa reticulada, rinoceronte blanco y elefante asiático. De hecho, el lugar es el que tiene más elefantes asiáticos de todo el país por lo que la experiencia es única.
Desde Wokii le deseamos toda la suerte del mundo al pequeño hipopótamo y esperamos pronto escribir sobre su buen desarrollo.