La duquesa de Sussex ofreció un poderoso discurso en línea a los alumnos del colegio Inmaculada Corazón, donde ella estudió, y condenó la muerte de Floyd.
Desde su residencia en Los Ángeles, la mujer más controversial de la corona británica, Meghan Markle, reapareció; frente a la cámara de su teléfono móvil, casi sin maquillaje, expresó su enojo luego del asesinato de George Floyd tras ser asfixiado por casi nueve minutos.
“La vida de George Floyd importaba, la vida de Breonna Taylor importaba, la vida de Philando Castile importaba y la vida de Tamir Rice importaba”, dijo Markle.
La esposa del príncipe Harry siempre se ha involucrado en causas sociales relacionadas con el racismo, debido a que ella misma lo ha sufrido.
Y no es la primera vez que circula un video suyo respecto de la discriminación. Esta semana, otra grabación suya de 2012 se volvió viral, cuando participó en una campaña antirracista:
“Estoy aquí porque creo que esta es una campaña en la que es importante participar”.
“Para mí esto es algo muy personal, soy de dos razas. Mucha gente no sabe cómo identificarme, y he tenido que ser una espectadora de las cosas que me han dicho, a veces chistes ofensivos, o cómo me han llamado”, declaró.
Pide perdón por el silencio
La expectativa de una pronunciación de Markle tras la muerte de Floyd era grande, y en el video aseguró que no lo hizo antes por miedo a la crítica pública: “Mi único error fue no decir nada“.
“Pon siempre las necesidades de los demás por encima de tus miedos (…) Ésta es una frase que me ha acompañado toda la vida y que desde la semana pasada tengo en mente más que nunca”, señaló.
Para Meghan, la conflictiva actual es un reflejo no solo de la situación actual de Estados Unidos, sino del mundo, y de “cómo las cosas pueden mejorar”.