El circo Roncalli reemplazó los animales por proyecciones en tercera dimensión, una innovación que termina con la crueldad animal en el ámbito circense.
Por mucho tiempo, los circos utilizaron animales en sus espectáculos. Grandes felinos, elefantes, caballos e incluso leones marinos vivieron confinados y bajo un constante maltrato y estrés. Afortunadamente, esto ha cambiado gracias a diversas organizaciones, activistas y hasta leyes en pro de los derechos de los animales, como la ley canadiense “Free Willy”.
Debido a la protección animal y a la disminución considerable en la venta de entradas, muchas compañías circences cerraron sus puertas, mientras que otras se dedicaron a brindar otro tipo de shows sin involucrar animales. Como el circo alemán Roncalli, fundado en 1976 y que en 1990 decidió disminuir los actos con animales por decisión propia.
Con el objetivo de brindar un mejor espectáculo libre de animales, el circo Roncalli se asoció en 2018 con una compañía llamada Optoma, especializada en audio y vídeo. Actualmente y gracias a esta asociación, se ofrece un show nunca antes visto, con proyecciones holográficas de animales que actúan y hasta interactúan con el público.
Para hacer esto posible, se instalaron once proyectores láser con la capacidad de crear efectos en tercera dimensión, además se colocó una pantalla transparente alrededor del escenario, cuyas medidas de 32 metros de ancho por 5 metros de profundidad, facilitan una visibilidad de 360 grados para todos los asistentes.
Este concepto de espectáculo del circo Roncalli en colaboración con Optoma, nos demuestra que todas las industrias pueden evolucionar en pro del medioambiente y los animales. Tanto zoológicos, parques acuáticos y la fabricación de ropa o accesorios deben orientarse a políticas libres de crueldad animal.
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