¿Te gusta tirarte al suelo en las redes sociales para que te levanten con likes? Cuidado, es una de las cosas que te hacen menos atractivo.
Tu belleza no depende sólo de tener una cara bonita, o un cuerpo saludable, o un peinado perfecto. Una de las cosas que te hacen menos atractivo a ojos de la gente depende 100% de tu personalidad y de tus modales.
Claro que tener una cara simétrica y bien proporcionada, con facciones que tradicionalmente se consideran ideales hace que seas guapo o atractivo en el sentido más básico de la palabra. Pero, de acuerdo con un estudio de Harvard Business School, hay una característica de tu personalidad que te hace menos atractivo.
De acuerdo con este estudio de Harvard, realizado en conjunto con la Universidad de Carolina del Sur en 2017, una de las cosas que te hacen menos atractivo es el humblebrag, o el ‘humilde alardeo’.
Es más: no sólo no serás atractiva o atractivo a ojos de los demás, sino incluso repulsivo y menos competente (ojo con esto, principalmente en el trabajo y ámbitos profesionales)
El humblebrag, que a veces hacemos todos sin darnos cuenta, consiste en presumir, quejarse y pretender ser humilde al mismo tiempo.
El término fue creado por el comediante Harris Wittel en 2015, como una forma de referirse a las celebridades que se quejaban y presumían al mismo tiempo, pensando que eso los hacía parecer más “humanos” o conectados con la realidad.
Piensa, por ejemplo, en todas esas celebridades que se quejaban por estar encerrados en sus enormes mansiones durante la pandemia. O en esas personas que presumen la foto de sus abs perfectos en Instagram con un mensaje tipo: “Me urge hacer ejercicio”.
¿Por qué el humblebrag es una de las cosas que te hacen menos atractivo?
Tener esta actitud no funciona para ganarte a la gente, pues de acuerdo con el estudio de Harvard, presenta una especie de falsa sinceridad, hace que las personas pierdan la confianza en ti y realmente no hace mucho por ayudarte a parecer alguien agradable y honesto.
Tal vez crees que eso va a hacer que te quedes como una persona agradable, sencilla y humilde, pero la ciencia dice que es una pérdida de tiempo que solo afecta tu imagen personal de forma negativa.
Es posible que tengas otras cualidades que te hagan ser muy atractivo a ojos de los demás (no sólo físicamente, claro), pero en cuanto comiences a hablar y a combinar tus quejas con tus alardes, podrías perder la posibilidad de conseguir una segunda cita, quedar mal en una entrevista de trabajo o incluso arruinar tu reputación en redes sociales.
Para evitar caer en aquellas cosas que te hacen menos atractivo, lo más importante es guiarte siempre por la sinceridad. Si te vas a quejar, hazlo. Si vas a presumir por algo, hazlo. Y si vas a ser humilde, adelante. Lo importante es que todo lo que te nazca, se perciba como auténtico. Claro, tampoco te excedas en quejas y en sinceridad.
Recuerda lo que dicen, la verdadera belleza está en el interior, y esta vez no hablamos de tu corazón o de algo cursi, sino de la forma en la que te comportas y expresas alrededor de las demás personas.
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