Amamos el sabor del café por la mañana, pero en ocasiones, después de tomarlo, nos altera los nervios.
Por las mañanas no hay nada mejor que una taza de café. Su olor tostado y sabor nos hacen sentir un gran confort y, además, nos llena de energía por todo el día. Sin embargo, muchos de nosotros no toleramos tanto la cafeína y, después de tomar una taza, nos sentimos alterados, con ansiedad y muchos nervios.
Afortunadamente, existe una cantidad exacta de café que no debemos exceder para alterar nuestros nervios, pero antes de revelártelo tenemos que decirte que no solo esta bebida puede causarte ansiedad.
Existe otros alimentos que contienen cafeína y que podrían alterarte, como el chocolate, el té y el refresco. Para evitar el nerviosismo, se recomienda que las personas no deben consumir más de 200 mg de cafeína al día.
Una taza de americano puede contener hasta 90 mg de cafeína, un espresso, 80 mg. Una taza de té puede contener 45 mg y una tablilla de chocolate, aproximadamente 25 mg.
Si consumes estos alimentos en un día, debes calcular cuánta cafeína ingresa a tu cuerpo mediante el café, el té o el refresco. Otra forma de evitar el nerviosismo es conocer el proceso de elaboración de tu café, u optar por alternativas como el café descafeinado.
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¿Qué tan bueno es consumir una taza de café descafeinado?
Si eres amante del sabor de esta bebida, pero no toleras los efectos de esta bebida en tu cuerpo, lo mejor que debes hacer es consumir uno descafeinado.
Este café es sometido a un proceso donde se elimina la cafeína de los granos verdes.
Pero, a pesar de esta modificación, el café aún conserva su sabor y beneficios en el cuerpo como su gran número de antioxidantes, acelera el metabolismo y reduce el riesgo de sufrir un infarto o desarrollar diabetes.
Ahora que ya sabes cómo tomar tu café, disfrútalo cada mañana, pero recuerda, menos de 200 mg al día.