¿Eres de los que se pregunta “por qué me siento viejo”? Se trata de una falsa percepción de la realidad. Así puedes combatir este sentimiento.
Envejecer o madurar no tiene nada malo: es un proceso totalmente natural e igual de digno que cualquier otra etapa de nuestra vida. Pero hay gente que se pregunta “por qué me siento viejo” en un sentido negativo. Y ese sentimiento es 100% producto de nuestra mente.
Sentirse viejo es algo muy común hoy en día. Socialmente, relacionamos estados de ánimo negativos con la vejez, así como enfermedades y malestares que supuestamente no tenemos de jóvenes.
Entonces, cuando nos enfermamos decimos: ya estoy viejo. Si nos cansamos demasiado pronto, decimos que estamos ya demasiado grandes. Esto no tiene nada que ver con la edad, sino con una percepción que está en nuestra mente y nada más.
Bill Gates, un hombre de más de 70 años, no se siente nada viejo. Él mismo lo ha dicho: lee mucho para empoderar su cerebro, mantenerse informado y sentir que es relevante y está conectado con el mundo actual.
Mientras, quizás tú a tus 20 o 30 años puedes decir “por qué me siento viejo”. Así que te compras esa idea y dejas de hacer ejercicio, decides ya no aprender algo nuevo y dejas de buscar experiencias que te saquen de tu zona de confort.
¿Por qué me siento viejo, según la ciencia?
Todos sabemos que nos estamos haciendo un poco más viejos con cada segundo que pasa y que, en algún momento, nos vamos a llenar de canas y arrugas. Pero la juventud puede ser un estado mental también.
Lo que hace que una persona se sienta vieja no es su edad, sino una serie de factores emocionales y mentales. Cosas como la soledad, sentir que ya no eres útil o relevante, o el burnout del trabajo pueden hacer que te sientas viejo por dentro y por fuera.
De acuerdo con la empresa Aging Care, otros factores que hacen que te sientas viejo pueden ser la falta de actividad física (que afecta tu movilidad y aumenta la aparición de dolores misteriosos), el dejar de aprender cosas nuevas o de socializar, llevar una mala alimentación (que también afecta la salud mental), tener estrés en exceso y el no cuidar de tu apariencia.
El mayor problema de sentirte viejo es que esto afecta negativamente la calidad de vida, el nivel de felicidad y de satisfacción que se pueden sentir.
Otro dato relevante sobre por qué me siento viejo es que hoy todos envejecemos físicamente más lento (el desgaste físico es menor al de nuestros abuelos, por ejemplo), pero mentalmente la exposición a la tecnología nos provoca un mayor desgaste.
Este choque (verse joven pero sentirse cansado o enfermo) nos lleva a pensar que algo está mal dentro de nosotros. Y claro, el prejuicio nos lleva a decir que es culpa de “la vejez”.
¿Cómo dejar de sentirme viejo?
Ya te estarás imaginando hacia dónde vamos con esto: la vejez no es sinónimo de decadencia ni de enfermedades. Si eso es lo que piensas, nos alegra decirte que no es real y solo estás siendo engañado por tu mente. Y por los prejuicios de la sociedad.
Desde que se aceleró la producción a niveles industriales hace casi dos siglos, se ha creado un culto a la juventud, en la cual los jóvenes son más productivos que los mayores. Esto demeritó las virtudes que tiene ser una persona mayor.
Pero más allá de invitarte a que deconstruyas esa mentalidad negativa en torno a la vejez, también te queremos recomendar algunos hábitos y acciones que puedes implementar para evitar sentirte viejo.
De acuerdo con la revista TIME, sentirte más joven puede llevar a que vivas más y mejor, y la buena noticia es que hay algunas cosas que puedes hacer para ayudarte a ti mismo.
“Tomo el control cuando me siento viejo”
Esto se traduce en cosas cómo planear tu día, elegir el camino a la oficina, cómo vas a trabajar y muchas otras cosas más. Cuando sientes que tienes el control de lo que haces y lo que te pasa, tiendes a sentirte más joven y como si pudieras hacer y conseguir más cosas de las que te propones.
“Me mantengo activo“
No quiere decir que tengas que correr maratones cada fin de semana o hacer horas y horas de ejercicio, pero mantenerte activo ayuda a que tengas buena salud, un peso correcto, más energía y mejor salud mental, es por esto que los expertos recomiendan hacer un mínimo de 30 minutos de ejercicio al día, que es mejor cuando lo haces al aire libre.
Por otro lado, la meditación, en la forma que quieras, es esencial para reducir el estrés, que es uno de los factores principales que aceleran el envejecimiento.
“Aprendo un nuevo hobby para no sentirme viejo“
Tu cerebro también es un músculo y para mantenerlo joven hay que desafiarlo, cosa que puedes lograr por medio del aprendizaje, ya sea que empieces a tocar un instrumento, busques una actividad distinta para aprovechar tu tiempo libre o realices algunos juegos de destreza mental, como el sudoku.
“Cuido mi alimentación“
La comida correcta no solo va a ayudar a que tu piel se vea mejor y tengas más energía, también puede darte los nutrientes que necesitas para tener un cerebro fuerte, poderoso y alerta, además de que ayuda a proteger la memoria y a reducir el riesgo de desarrollar enfermedades como el Alzheimer o la demencia.
También te recomendamos: ¿Realmente funciona la semana laboral de 4 días?