La compañía y el amor pueden hacer la diferencia entre una corta o larga vida.
Los humanos somos seres sociables. Es un hecho. Nos encanta vivir rodeados de varias personas y pertenecer a un grupo donde compartamos los mismos intereses, compromisos y metas.
Por lo que no es extraño saber que, si nos mantenemos solos o alejados de las personas, podemos enfrentar diversos problemas de salud física y mental como la depresión.
Es por eso que, cuando seamos ancianos, se recomienda tener una vida activa y rodeada de personas. De esta forma garantizamos que vivamos más.
De acuerdo con un estudio de la Universidad de California, mientras más tiempo pasemos en compañía de los demás durante la tercera edad, más años lograremos vivir.
El estudio de mil 600 adultos mayores de 71 años de edad encontró que los ancianos que viven solos tienen un índice de mortalidad mucho mayor que aquellos que aún viven o se frecuentan con la familia.
Se encontró que más del 20% de los ancianos que vivían solos durante el estudio, murieron en los 6 años posteriores.
En quienes vivían con su familia o acompañado por alguien más, su mortalidad fue de solo del 14%.
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Beneficios de la familia durante la vejez
De acuerdo con Sandra García, psicóloga del Instituto Barcelona de Psicología, los adultos mayores o abuelos, juegan un rol de gran importancia dentro de la familia.
Los ancianos pueden ser vistos como un apoyo emocional, lo que les permite sentirse seguros y capaces.
Además, hablarle a nuestro padre o madre para que nos ayuden a cuidar de nuestros hijos el fin de semana, los hace sentirse necesarios y con un gran valor dentro de la familia. Además les ayuda a vivir por mucho más tiempo.
Los ancianos que “se sienten necesitados por los suyos suelen vivir más y con mayor calidad de vida”.
Así que ya sabes. Si quieres que tus abuelos o tus padres vivan por mucho más tiempo, es momento de visitarlos y pedirles su ayuda o consejo que seguro te darán con mucho amor.