Se tratan de 5 frases cortas que demuestran sensibilidad, empatía y sobre todo, que eres una persona abierta y centrada. ¿Las practicas?
Podríamos comenzar este tema diciendo algo así como: “según nuestros propios estudios…” o, “según nuestra última experiencia laboral…”, pero no, realmente estas 5 frases que te presentamos no son una mera invención.
¿Qué quiere decir esto? Pues que hay ciertas palabras -muy sencillas- que ordenadas de cierta manera y dichas en el momento exacto pueden lograr una conexión extraordinaria y cambiar una percepción sobre ti.
Y ¿por qué es tan importante darles su importancia? Fácil, porque tanto de manera personal, así como profesional, pueden generar una imagen de éxito, cooperación, carisma y confianza con todas las personas que te rodean o diriges, provocando un cambio positivo.
¿Emocionalmente inteligente o no?
Ser más inteligente no quiere decir que lo sabes todo de todo o viceversa –tanto técnica como humanamente. ¡No! Significa que sabes escuchar y actuar de forma equilibrada y controlando tus emociones. Por eso, queremos recomendarte seguir la filosofía de estas cinco frases, que han sido resultado de la experiencia y el trabajo de Fairygodboss.
¿Quiénes son ellos? Pues nada más y nada menos, que la comunidad profesional más grande de Estados Unidos, que ayuda a las mujeres a obtener información privilegiada sobre salarios, cultura corporativa, beneficios y flexibilidad laboral. Unos verdaderos expertos nos iluminan, y sí, nosotros también los recomendamos. Pon estas cinco frases en práctica y verás el cambio a tu alrededor.
- “Gracias por entenderlo”
Quita el protagonismo de tu lado –esa es la imagen falsa que podrías crear al decir un simple “lo siento”. Es momento de volver positivo algo impositivo o de carencia de empatía. Decir algo tan sencillo como esta frase, está comprobado que te hace emocionalmente más inteligente y das el mensaje de que aprecias la comprensión de los demás, en cosas tan básicas como el entender alguna situación especial como el llegar tarde, equivocarte o un simple olvido. Ya no digas “perdón por…”, mejor utiliza el “gracias por entenderlo”.
- “¿Tiene sentido?”
Si eres de los clásicos que termina cualquier presentación o tema con un: “¿dudas, preguntas?”, “hablen ahora o callen para siempre…”, pues no lo recomendamos para nada. Las clásicas del ‘godínez pura sangre’ más bien están dando a entender que como está bien, ya cumpliste y punto. Además, puedes causar una sensación de inseguridad y de que menosprecias su atención o conocimiento.
Mejor aplica esto: “¿tiene sentido esto que les estoy diciendo?” Si lo que realmente quieres es generar un cambio de percepción en los otros de forma adecuada. Utilizar esta frase tan corta y precisa es incluyente, les hará parecer que todo es más sencillo, demostrarás empatía y a la vez reconfortarás a quien te esté escuchando. Todo el mundo ama estas cualidades y tú serás emocionalmente más inteligente.
- “Pero, cuéntame más”
No es que quieras ser chismoso. Que no se confundan. Esta frase de “dime más, o cuéntame más al respecto” nos está proyectando en el otro, como alguien que está interesado en lo que le pasa y que verdaderamente lo escuchaste.
Es decir, demuestra atención total con tu amigo o compañero y, a la vez, le estás diciendo que siempre tiene quien le escuche.
- “Sería grandioso saber más sobre esto… ¿podríamos tomarnos un café después para seguir hablándolo?”
Puede ser algo muy extenso –o intenso–, tal vez, pero estas sencillas frases han demostrado que cada vez que las utilizas, elevan tus bonos de percepción positiva.
Son complemento de aquella: “cuéntame más…”, aunque más bien nos indica que llevas tu atención personal más arriba y tu nivel de escuchar al otro, es insuperable. En pocas palabras, comunica que el tema en cuestión es lo suficientemente importante y que serás feliz de darle seguimiento.
Ojo: debes de aplicarla de manera sutil y cuidadosamente, ya que si no lo haces de esa forma, generarás un efecto contrario. Solo debes hacer notar un interés genuino, porque quieres escuchar todo a profundidad, pero que no parezca que estás siendo demasiado intenso.
- “¿Qué opinas de eso? ¿Se me está pasando algo?”
La amabilidad y la expresión amable ante todo. Cuando el equipo o una persona escucha ésta, la última de las cinco frases que te hacen una persona emocionalmente inteligente, inmediatamente sienten que los estás tomando en cuenta.
Es decir, que lo que ellos piensen u opinen, sumará al proyecto y que sí pasa algo si lo hacen. Muchas veces, las personas que te escuchan, al no decir las palabras adecuadas, pueden sentirse menospreciadas y hasta agredidas, porque no preguntas de forma atinada qué les parece lo que acabas de decir o presentar.
Incluye a todo el equipo utilizando una de estas cinco frases para darle voz a sus comentarios. Verás que todo saldrá mucho mejor y que, igualmente, servirá para confirmarles que siempre vale más el trabajo en equipo que la individualidad extrema.
Suscríbete aquí a nuestro newsletter semanal y recibe buenas noticias directamente en tu correo electrónico.
También lee: Conoce a Christian Busch, un hombre con suerte inteligente.