Dicen que la vida comienza a los 40. Hoy, Charlize Theron cumple 45 años y está a la mitad de esa década que lo inaugura todo. Y se ve más plena que nunca.
Hace no muchos años, pasar de los 40 era una sentencia de muerte para las carreras de las mujeres en Hollywood. Por fortuna, esas barreras se han roto y marcan un precedente para que otras industrias lo tomen como ejemplo. Charlize Theron cumple 45 años, y ese número que antes la hubiera alejado de los protagónicos de las películas, hoy interesa poco. La sudafricana es, además de una actriz ganadora del Óscar, una madre soltera ejemplar, productora, filántropa y dueña de un gran sentido del humor. Ha sido un pilar del movimiento #MeToo y es fundadora de Africa Outreach Project, que trabaja para empoderar a la juventud africana y mantenerla saludable y libre de VIH.
Se trata, pues, de una mujer que ha conseguido un crecimiento personal y profesional digno de celebrar. La hemos visto transformar su físico decenas de veces para lograr la mayor credibilidad en un papel, levantar la voz ante una injusticia y hasta recibir el premio Crystal del Foro Económico Mundial en Davos.
Charlize, como algunas de sus contemporáneas, es un parteaguas en los role models femeninos. Una mujer alejada de los clichés de la superficialidad y la vanidad, aunque sea bellísima, y preocupada, más bien, por una evolución completa en lo que lo físico, lo espiritual, lo intelectual y lo emocional no se cuentan por separado.
Charlize Theron cumple 45 años y tiene muchos planes para celebrar
No. No hará una fiesta en tiempos de pandemia. Los planes de Charlize Theron ahora que ha cumplido 45 años, buscan un crecimiento continuo, pero también diversión. Hace unas semanas dijo a The Hollywood Reporter que le encantaría hacer un crossover de Atomic Blonde y John Wick. La noticia ya emocionó a los fanáticos de las películas de acción y, la verdad, ver a Charlize Theron junto a Keanu Reeves sería una maravilla. Ambos han hecho un gran match en películas como El abogado del diablo, que fue un hito en la carrera de Charlize, que apenas comenzaba en los años 90, y en Sweet November, un romance lacrimógeno que filmaron en 2001.
Pero entre sus proyectos presentes está The Old Guard, película de Netflix de la que es productora, y la secuela de Atomic Blonde, que se anunció aunque no hay fecha de lanzamiento. Todo esto lo conjuga con su vida cotidiana con sus hijas Jackson, a quien ha apoyado en su transición de género, y August. Y, por supuesto, sigue trabajando como Mensajera de la Paz de la ONU.
No te pierdas: Rare Impact Fund, la fundación de Selena Gomez por la salud mental
