¡No subestimes su tamaño! Las pequeñas semillas de sésamo o ajonjolí son más nutritivas de lo que crees.
El ajonjolí, también conocido como semilla de sésamo, es un alimento muy usado en la cocina mexicana.
Lo podemos ver en el mole, algunas galletas, en aceites comestibles e incluso como parte de la decoración de panes, como es el caso del pan de muerto.
Pero el ajonjolí es más que un ingrediente o decoración en nuestra gastronomía. Es un alimento con muchos beneficios que debes conocer.
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Beneficios del ajonjolí
Antioxidantes
El ajonjolí contiene una gran cantidad de antioxidantes como sesamina y sesamolina.
Estos antioxidantes ayudan a combatir el daño causado por los radicales libres en la piel y las células.
Además, ayudan a prevenir diversos tipos de cáncer.
Excelente para la piel
El ajonjolí protege la piel por dentro y por fuera, ya que su aceite es rico en vitamina E.
Este antioxidante ayuda a nutrir la piel, suavizar e incluso protegerla de los daños causados por los rayos UV.
Protege el corazón
Otro gran beneficio de estas semillas es que protegen al corazón gracias a sus ácidos grasos poliinsaturados y monoinsaturados.
Estas grasas son beneficiosas para la salud cardiovascular, ya que ayudan a reducir los niveles de colesterol malo (LDL) y aumentan los niveles de colesterol bueno (HDL).
Mejora la digestión
¿Problemas digestivos? Diles adiós con ajonjolí, ya que es rico en fibra, excelente para regular el tránsito intestinal.
También ayuda a prevenir el estreñimiento y promueve una flora intestinal equilibrada.
Regula la presión arterial
Otra forma en que el ajonjolí protege al corazón es regulando la presión arterial.
Las semillas de sésamo contienen magnesio, un mineral que ayuda a la regulación de la presión arterial, previniendo la hipertensión.
Aunque es muy pequeño, el ajonjolí tiene grandes propiedades para nuestro organismo y es necesario consumirlo para tener una buena salud.
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