Si notas tu piel irritada, reseca o incluso con alguna infección, puede ser que la causa sean estos errores que todos cometemos en la ducha.
Si has notado que tu piel está seca e irritada por las mañanas, tal vez no se deba al clima o al viento frío de otoño, sino a tus malos hábitos en la ducha.
Y es que al bañarnos solemos cometer muchos errores que podrían afectar seriamente el estado de nuestra piel.
Duchas muy calientes
Sí, sabemos que tomar una ducha caliente por la mañana es muy reconfortante; sin embargo, estás quemando toda tu piel.
El agua caliente puede provocar quemaduras en el cuero cabelludo y el resto de la piel; además hacen que se pierda la grasa natural de nuestra dermis.
Tardar mucho tiempo en la regadera
Aunque el baño es el mejor lugar para organizar nuestro día o reflexionar sobre la vida, es necesario que las duchas sean más cortas, esto para no desperdiciar agua y evitar problemas como resequedad o picazón en la piel.
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Usar el jabón inadecuado
¿Quién no ama iniciar el día con el aroma a lavanda o frutos rojos en la piel? Aunque lo aromas de los jabones suelen ser revitalizantes, podrían afectar nuestra dermis.
El uso constante de jabones en barra, perfumados y antibacteriales pueden irritar la piel. Lo mejor es usar productos suaves y neutros.
Abusar de la esponja
Estamos acostumbrados a que para limpiar nuestro cuerpo hay que tallar y tallar con la esponja; sin embargo, el uso de estos productos podría traer infecciones a la piel.
Las esponjas, además de lastimarnos e incluso cortarnos, pueden alojar decenas de bacterias y hongos que dañarían nuestro rostro, brazos o cualquier parte del cuerpo.
Los dermatólogos revelan que lo mejor para nuestra piel es usar jabón directamente con las manos y exfoliar nuestro cuerpo al menos 1 vez cada 7 o 15 días.
No hidratar la piel
Por último, uno de los errores más comunes que cometemos es no hidratar nuestra piel inmediatamente al salir de la ducha.
Cuando nos bañamos, parte de la grasa natural de nuestra piel se pierde con el jabón, algo que debemos recuperar inmediatamente al salir del baño.
Los dermatólogos recomiendan hidratarnos de pies a cabeza unos 60 segundos después de salir de la ducha, esto para evitar irritaciones y resequedad.
¿Has cometido alguno de estos “pecados” de la ducha?