Smartick surgió como una propuesta de enseñanza digital de matemáticas. Pero Javier Arroyo, su fundador, vio la oportunidad de transformar el planeta.
Smartick surgió como una propuesta de enseñanza digital de matemáticas. Pero Javier Arroyo y Daniel González de la Vega, sus fundadores, vieron la oportunidad de transformar el mundo con su plataforma, y cada día demuestran que en el mundo empresarial se pueden hacer las cosas bien.
Por un lado, Smartick ha logrado hacer más amigables las matemáticas a millones de niños y niñas alrededor del mundo. Por otro, se ha convertido en uno de los mejores lugares para trabajar gracias a tener una máxima: la conciliación. De esta manera, los horarios flexibles y el teletrabajo no son cosa de la pandemia, sino que son una realidad dentro de esta compañía.
Otro dato importante a destacar es que al ser una compañía 100% digital se reduce la huella de carbono en cuanto al uso de libros o cuadernos, y no existe la necesidad de desplazarse para acudir a una clase.
Al mismo tiempo, Smartick tiene una fuerte convicción por enseñar a los niños y a las niñas matemáticas sin importar país, condición social o situación personal en la que se encuentren.
Eliminar barreras de cualquier tipo
La plataforma cuenta, por ejemplo, con el Programa 1=1 centrada en mejorar la formación matemática de los niños enfermos de cáncer. El título del programa hace referencia a que por cada suscripción que realiza un nuevo cliente, Smartick regala otra a un niño enfermo de cáncer hospitalizado o convaleciente en su casa.
Además, al ser un método personalizado, se ha vuelto una herramienta imprescindible dentro de la enseñanza de las matemáticas para niños con necesidades educativas especiales. Es el caso de niños con trastornos del espectro autista o TDA, Síndrome de Down o discapacidad intelectual.
También es importante destacar que Smartick cuenta con un programa de becas llamado Cabify Smartick, dedicado a niñas, con el objetivo de eliminar barreras de género en la educación. Con esto se busca que más mujeres puedan acceder en un futuro a carreras de base científica y tecnológica, en las que el conocimiento de las matemáticas es fundamental.
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