Te decimos cómo puedes contribuir al rescate del Río Lerma, uno de los más contaminados de México y que necesita nuestra ayuda ¡urgente!
Desde hace algunas décadas, el Río Lerma, ubicado en el Estado de México, es conocido por su mal olor y por sus altos niveles de contaminación, pero esto pronto podría cambiar gracias a un proyecto de rescate a base de cáscaras de huevo.
El proyecto está a cargo de H2O Lerma, una organización conducida por la Dra. Verónica Martínez Miranda y la Dra. Ivonne Limones Hernández, ambas investigadoras de la Universidad Autónoma de la Universidad de Morelos, CONACYT y el Instituto Interamericano de Tecnología y Ciencias del Agua (IITCA).
Para filtrar el agua contaminada de los mantos acuíferos de la región, H2O Lerma desarrolló un sistema para limpiar pozos de abastecimiento de agua potable privados, públicos y gubernamentales que abastecen a las comunidades y a la industria.
El sistema consiste en cavar zanjas de aproximadamente un metro de profundidad y 80 centímetros de ancho. Luego se vierten cascarones de huevo como elemento base, cal hidratada y óxido de magnesio.
Las líderes del proyecto de rescate del Río Lerma están invitando a la población a entregar cascarones de huevo secos y triturados. Aquí te dejamos un enlace con información sobre los centros de acopio, por si quieres contribuir.
¿Qué pasa en el Río Lerma?
Hasta hace unos años, el Río Lerma era el hábitat de especies endémicas del Valle de México como patos mexicanos, ajolotes y charales que eran consumidos por los lugareños.
Debido a la falta de rescate del Río Lerma, el afluente está contaminado por llantas, pañales, garrafones de agua, juguetes viejos y grandes cantidades PET.
Pero el principal problema son las aguas residuales sin tratar de las ciudades urbanas y las que se producen en casa, según Pedro Ávila Pérez, investigador del Instituto Tecnológico de Toluca.
En 2019, se presentó una iniciativa para implementar políticas de saneamiento en el Río Lerma y frenar los impactos medio ambientales y los riesgos a la salud.
Un estudio de la UNAM mostró que el curso alto del río Lerma contiene sedimentos que pueden clasificarse como extremadamente tóxicos, lo que pone en peligro a las comunidades aledañas al Río Lerma.
Además, los casos de cáncer en niños han aumentado en los últimos años: 40% de los casos son debido a factores ambientales. La mayoría son niños que viven en las cercanías de los canales de aguas negras en el Río Lerma.
La Comisión Nacional del Agua determinó que, hasta 2010, en el Río Lerma se tenían detectadas 375 descargas industriales de más de 700 industrias.
Se necesitan más que huevos para el rescate del Río Lerma
Dado que el principal problema en la contaminación del Río Lerma son las descargas de aguas residuales industriales, se necesitaría ponerle fin a esta práctica antes de cualquier plan de rescate.
Roberto Castañeda Tejeda, presidente del Consejo de la Cuenca Lerma–Chapala, señaló que para el rescate del Río Lerma se requieren más de 10 mil millones de pesos, pues se necesitan adquirir plantas de tratamiento de uso doméstico por las descargas que realizan las empresas industriales.
Con dicha inversión, se estaría solucionando 80% de la problemática, pues hoy por hoy las descargas de contaminantes sobre el Río Lerma provienen de cinco entidades por las que pasa el afluente.
Entre Guanajuato, Querétaro, Estado de México, Michoacán y Jalisco hay más de 10 mil industrias que descargan contaminantes sobre el Río Lerma y sólo el 35 % de las aguas residuales se tratan.
El proyecto de rescate del Río Lerma con cascarones de huevo, que encabeza la organización H2O Lerma, es una buena estrategia que ya ha dado resultados en otras partes del mundo.
Quizás esto ayude a reducir la contaminación momentáneamente, pero es necesario cortar el problema de raíz: pedir a las empresas que dejen de verter sus aguas residuales sobre el Río Lerma.
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