Es cierto que muchas veces dudamos cuando queremos comprarnos algún presente porque logramos algo, cambiamos de trabajo, o simplemente porque lo merecemos. ¡Cambiemos esa idea!
Nuestra identidad tiene un impacto innegablemente importante en la forma en que nos vemos a nosotros mismos y al mundo que nos rodea. Y precisamente esta identidad se va forjando con el paso de los años, alimentándose de aprendizajes sociales, autoestima, desarrollo humano y carácter.
Ahora bien, nuestra identidad no siempre logra el éxito cuando se trata de alinear nuestras emociones, pensamientos y acciones para entender cuándo sí nos corresponde o nos merecemos algo.
Y comprendamos ‘identidad’ como nuestra forma de ser o manera de percibir el mundo exterior con respecto de nuestros valores y juicios… es ahí cuando la objetividad personal se desvanece a la menor provocación. E incluso, dudamos de que algún reconocimiento o premio haya llegado a nosotros realmente por simple jugarreta del destino. ¿Te suena familiar?
La motivación es clave para autopremiarnos
Para algunos, esta sensación que provoca el recibir un premio -por la razón que sea- radica en el orgullo, para otros en la satisfacción y para muchos más en el mérito propio.
Sin afán de categorizarte en alguna casilla, todos en algún momento hemos sentido avaricia, placer, modestia, timidez… y una decena más de sentimientos. Tranquilo, es normal, lo peligroso es cuando la tendencia se columpia hacia lo negativo. De acuerdo con la pedagoga Boekaerts, la clave para equilibrar la emoción y la razón entre lo que merecemos y queremos, está en tener clara nuestra motivación.
Así de sencillo, si detrás de ese gustito que nos queremos dar o esa herencia que nos cayó y no teníamos contemplada, no hay una causa, un estímulo o un impulso genuino desde nuestras propias trincheras, es entonces cuando las grietas emocionales comienzan a brotar. Lo mismo sucede cuando nos autopremiamos; en determinadas ocasiones pensamos que ese “regalo” es demasiado para nosotros, que no lo necesitamos o que no tendría sentido recibirlo.
Autoestima vs. satisfacción
De ahí se origina el supuesto malestar… Bien nos lo dice Boekaerts: “una de las claves para autorregularse es anticipar la recompensa que nos va a aportar el logro de la meta. Para ello es imprescindible fijar una meta que realmente sea importante para nosotros, conectada con nuestros valores, nuestros estilos motivacionales, nuestros intereses, nuestro potencial y nuestras características personales, que sea significativa y tenga sentido para nuestra vida”.
¡Eh voilà!, una vez que comprendemos la motivación de la autorecompensa, la satisfacción será aún más genuina.
Otro tema que juega un papel fundamental es la autoestima, quien será el mayor termómetro emocional al decidir si nos autopremiamos o no. Y lo más importante: será quien definirá nuestro grado de satisfacción.
Área de compras
¿Has logrado controlar tus emociones negativas?, Pues ahora es momento de pasar a la autopremiación. Y quién mejor que Peyrelongue Chronos para sugerirnos los mejores regalos que te harán sentir feliz, motivado y satisfecho. Elige el que mejor vaya con tu personalidad y recuerda: ¡fuera arrepentimientos!
Complemento perfecto
Aretes de oro blanco de 18K con 4 diamantes redondos y 1 rubí oval de 2.18 ct.
Tu mejor acompañante
Pulsera de oro rosa de 18k con diamantes brown; otra en oro rosa de 18K con 12.85 ct de diamantes; y pulsera stretch en oro rosa de 18K con 17.80 ct de zafiros.
Homenaje a una reina
Reloj automático de oro rosa de 18k, Reina de Nápoles 8968, Breguet.
La vida en rosa
Reloj automático en acero inoxidable Flying Regulator Open Gear Pink Panther, de Chronoswiss.
Recuerdos e historias
Caja de relojes “Wolf” en acero perforado cortado con láser de cobre fundido con líneas limpias y elegantes.
Con los pies en la Luna
Reloj con caja de oro rojo de 41.5mm, Perpetual Moon, Arnold & Son
La próxima vez que estés considerando dónde comprar o qué regalarte, detente un momento y pregúntate si esta es la opción que deseas o la opción que crees que mereces.
Visita la boutique de Polanco o de Artz Pedregal de Peyrelongue Chronos para que elijas aquella pieza que te pondrá muy feliz y sobre todo… ¡que te mereces!
Peyrelongue Chronos
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Centro Comercial Artz Pedregal
Periférico Sur 3720, Jardines del Pedregal, Álvaro Obregón, 01900, CDMX, México.
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