No es sorpresa que Moët & Chandon profundice su relación con la Fórmula E, al promover un compromiso compartido con el medio ambiente.
Desde que inició este gran romance de una de las casas de champaña más importantes de todo el mundo, con la Formula E (la carrera profesional con vehículos eléctricos), el fin estaba predicho: más que una relación de socios comerciales que a todos convenía, los impulsaba promover, sobre todo, mediante diversas acciones un compromiso mayormente ecológico.
La unión verde hace la fuerza
Desde hace muchos años que Moët & Chandon lidera no solo el mercado de las ventas de champagne en el mundo sino que es un verdadero ejemplo como líder precursor de su marca con energía sostenible. En 2007 obtuvo la certificación ISO-14001 para todos sus sitios y actividades. No paró ahí, en 2014 obtuvo una certificación ambiental de alta calidad, que muy pocas empresas en el mundo pueden presumir.
Por su lado, el mundo del automovilismo también le ha entrado al tema del cuidado ambiental con la Fórmula E, donde uno de los objetivos principales de su “nacimiento”, fue el combate el cambio climático. ¿Cómo? ofreciendo vehículos eléctricos como una solución a la contaminación del aire, rompiendo las barreras al mercado de vehículos eléctricos.
Esta serie de carreras fue galardonada con la certificación ISO 2012. Un “reconocimiento” de alto talante del cuidado del entorno, porque no cualquiera puede certificarse con esto, lo que lo hace líder en la práctica sostenible. Con todo el glamour, emoción y adrenalina de las carreras de autos, pero contaminado muchísimo menos que las grandes eventos que podemos ver en la Fórmula 1, por ejemplo.
Moët y la Fórmula E: una alianza electrizante en México
A propósito de que se llevará a cabo en nuestro país la ABB FIA Formula E World Championship, la competencia de automovilismo en la que participan sólo monoplazas eléctricos, Moët y la marca de carreras han aprovechado la ocasión para promover su alianza electrizante y sustentable en pro del medio ambiente. Será el Autódromo Miguel E. Abed de la ciudad de Puebla, los días 19 y 20 de junio, la sede del tan esperado regreso de la Fórmula E a México.
Qué mejor ocasión para reiterar el motivo de la gran unión sustentable que ha hecho de esta relación entre Moët y la Fórmula E, un verdadero ejemplo de dos socios que buscan principalmente con su alianza promover acciones en sus estructuras y actividades que realmente impacten en la migración a energías más sustentables.
Correr autos y brindar, pero contaminar menos
Si dos grandes marcas se unen por promover el uso de energías más “verdes”, entonces significa que el rumbo es el correcto y debemos aplaudir estas sociedades. Como dijimos ambas, Moët y la Fórmula E, han ido fomentando, a través de los años, más y más, con acciones reales y compromisos que van más allá de la ganancia comercial. Son una apuesta del futuro (cada vez más cercano): seguir impulsando prácticas sustentables y que hoy son parte de su agenda prioritaria. Ambas, no limitan recursos invirtiendo en los más recientes desarrollos tecnológicos, para contaminar menos.
La innovación como instrumento para reimaginar la tradición mueven a Moët y la Fórmula E para continuar caminando –mejor dicho, corriendo– en pro de experiencias que sean, si, sofisticadas, pero no dejando a un lado la sustentabilidad, sino haciéndola protagonista también.
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