Los relojes Oris reconocieron el esfuerzo de quienes combaten al COVID-19 desde la primera línea con su campaña Héroes Locales. Conoce al ganador de México.
Desde que inició el confinamiento, la marca de relojes Oris lanzó su campaña Héroes Locales. Se trató de una invitación a nominar a las personas que, en diferentes partes del mundo, luchan desde la primera línea contra la pandemia. La respuesta a este llamado fue sorprendente. Más de mil héroes fueron nominados por sus esfuerzos. Pese a lo difícil que fue hacerlo, Oris, que buscaba a 50 héroes, tuvo que hacer una selección. De modo que, aunque todas las nominadas son personas heroicas, hoy hay 50 ganadores del premio Héroe Local de Oris.
El premio fue, por supuesto, un reloj. Cada uno de los héroes pudo elegir el de su agrado en el catálogo de Oris y la marca se encargó de enviárselos con su nombre grabado en el reverso de la caja del reloj.
Los relojes de Oris tienen precios que inician en los mil euros, pero más allá de su valor económico y de su calidad Swiss Made, lo que Oris deseó fue darles un momento de alegría con un objeto significativo que podrá permanecer en su familia durante generaciones. El recuerdo de los tiempos más duros que la humanidad ha vivido en décadas y en los que ellos fueron un factor de cambio positivo en la vida de miles.
Te presentamos al ganador mexicano de Héroes Locales, la iniciativa de los relojes Oris
Por supuesto, de entre todos los combatientes que esta batalla tiene en el mundo, hay un mexicano. Para la marca de relojes Oris, estos Héroes Locales que son a la vez héroes del mundo, encontraron en Gustavo Bonnabel a su representante en México.
Gustavo es un médico pasante del servicio social de la UNAM que actualmente vive en Mérida, Yucatán. Desde el Hospital Regional de Alta Especialidad de la Península de Yucatán, se ha dedicado a tratar pacientes con COVID-19 desde que inició la pandemia.
Gustavo ha estado completamente aislado de su familia para no ser un factor de riesgo para ellos y solo los ha visto a través de la pantalla. Pero, por ahora, está 100% dedicado a su trabajo. “Me da mucho orgullo saber que los años de estudio están rindiendo frutos en pacientes”, asegura.
No baja la guardia y sus pacientes y colegas lo reconocen por siempre ofrecerles una sonrisa. Para él, recibir este regalo inesperado de Oris fue una gran emoción. “Estoy muy contento de usarlo y leer mi nombre grabado en él; es de gran significado para mí”. ¡Bravo, Gustavo!
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