Todos necesitamos amigos, pero ¿te has preguntado qué tipos de amigos necesitamos para tener un balance en la vida? Aquí te contamos.
Nadie duda del poder que tienen los amigos en la vida de toda persona: son quienes nos ayudan a salir adelante, a superar situaciones difíciles y nos acompañan en los buenos momentos. Pero cada grupo debe tener diferentes tipos de amigos para que la unión perdure.
Así como se conforma un equipo de trabajo o un gabinete de gobierno, los grupos de amigos deben incluir “de todo un poco” para que exista un balance y contrapesos. Muchas veces los formamos por inercia, pero en otras necesitamos salir a buscarlos.
Camille S. Johnson, doctora en psicología de la amistad, ha realizado numerosas investigaciones sobre los tipos de amigos que todo adulto necesita. De esas investigaciones, publicadas en Psychology Today, podemos rescatar 5 grandes categorías de amigos.
Tipos de amigos que necesitamos
La clave para construir un grupo de amigos efectivo es tener una colección de personas que brinden diferentes fortalezas y tipos de apoyo. Ese grupo debe incluir habilidades y temperamentos que se complementen.
De acuerdo con Johnson, estos tipos de amigos son los siguientes:
Amigo amable y agradable
En los tipos de amigos que debemos tener, el primero es el agradable. Pero no sólo nos referimos al que le cae bien a todos, el más divertido, el más gracioso. Ser un amigo agradable también es aquél que puede protegernos de otros elementos negativos en el entorno.
Por ejemplo, los adolescentes agradables con amigos agradables tienen menos probabilidades de experimentar victimización y menos probabilidades de culpar a factores externos por las dificultades.
Las adolescentes agradables con amigos agradables tienen menos probabilidades de internalizar los problemas y tienen mayores habilidades sociales.
Amigo poco agradable
Entre los tipos de amigos que debemos tener, siempre vale la pena tener al típico “poco divertido” que no le cae bien a todos. Estos amigos pueden aportar un saludable escepticismo para comprender los motivos y las acciones de los demás. Es decir, un contrapeso.
También, los amigos poco agradables pueden ayudarnos a seguir velando por nuestros propios intereses. No todo pueden ser frases de amor y de motivación.
Amigo pesimista o negativo
Una persona antipática o que le da mucho peso a lo negativo también es necesaria en nuestras vidas. Los estados de ánimo negativos nos suceden a todos. Un amigo que pueda validar esos estados de ánimo negativos y sentir empatía por ellos es esencial.
La validación de las emociones negativas puede aumentar la autoestima y reducir los estados de ánimo negativos y la agresión hacia los maltratadores. Un amigo pesimista puede compartir tu miseria y eso puede ayudarte a seguir adelante.
Amigo competitivo
Psicológicamente, esta competitividad podría etiquetarse como “envidia”. La palabra envidia suena demasiado negativa: ¿por qué necesitaría yo un amigo que me tiene envidia o a quien yo le tenga envidia? Pero resulta que este sentimiento puede ser motivador.
Ser superado, particularmente cuando existe la oportunidad de desempeñarse bien en un campo diferente, puede impulsar a las personas a trabajar más duro y persistir en las tareas difíciles. Así que estar rodeado de personas que no te hacen sentir tan bien puede ayudarte a esforzarte y lograr más. Obvio, siempre hay un límite.
Un viejo amigo
Entre los tipos de amigos, siempre es necesario aquél que te mantiene conectado a tierra, que te recuerda de dónde vienes y por todo lo que has pasado. Esos amigos suelen ser viejos amigos, las personas que “te conocían cuando…”.
Las amistades de muchos años nos ayudan a darle continuidad a nuestras vidas. Pero al mismo tiempo contribuyen a que desarrollemos el sentido de nosotros mismos a lo largo de la vida.
En resumen, así como necesitamos una variedad de sabores en la cocina para crear un buen platillo, necesitamos diferentes tipos de amigos que nos animen, nos tranquilicen y nos mantengan honestos.
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