Una empresa suiza ha logrado absorber el CO2 de la atmósfera para almacenarlo en la tierra y reducir el impacto de la contaminación en el planeta.
Los árboles, a través de la fotosíntesis, absorben CO2 del aire que respiramos y lo almacenan en la madera y en suelo. Después comienza el proceso para producir oxígeno. Más o menos se han basado en este sistema natural de limpieza ambiental pero que será llevado a gran escala.
La empresa de la que hablamos se llama Climeworks y está ubicada en Suiza. Para ello, han construido una planta de captura directa de aire más grande del mundo, con la que han podido eliminar el dióxido de carbono para luego almacenarlo en formaciones rocosas. De manera muy similar al proceso que realizan los árboles.
La tecnología de Captura Directa de Aire (DAC) extrae CO2 directamente de la atmósfera. El CO2 puede almacenarse permanentemente en formaciones geológicas profundas, logrando así la eliminación de dióxido de carbono (CDR). Los beneficios de esta tecnología incluyen una alta permanencia de almacenamiento y una huella de agua y tierra limitada.
El CO2 capturado también se puede utilizar, por ejemplo, en el procesamiento de alimentos o combinado con hidrógeno para producir combustibles sintéticos.
Microsoft y Spotify se suman a la iniciativa de Climeworks
Y podríamos decir que, en una transición a cero emisiones netas, el CO2 utilizado para producir combustibles sintéticos tendría que capturarse cada vez más de fuentes de bioenergía sostenibles o de la atmósfera para evitar emisiones retardadas de CO2 de origen fósil cuando se quema el combustible. Justamente Climeworks se ha sumado a esta gran innovación.
Incluso, Microsoft, Shopify y Stripe, sus primeros clientes corporativos, ya han pagado a Climeworks para compensar sus emisiones de dióxido de carbono.
La planta de absorción de CO2 más grande del mundo, dirigida por la empresa suiza Climateworks, se ha nombrado Orca. Y absorberá anualmente un volumen de emisiones equivalente a unos 870 coches. Orca aumentará la capacidad total de DAC en aproximadamente un 50%, sumándose a la docena de plantas más pequeñas que ya funcionan en Europa, Canadá y Estados Unidos.
Orca se compone de ocho cajas del tamaño de un contenedor de transporte; cada una de ellas equipada con una docena de ventiladores que aspiran aire. El CO2 se filtra, se mezcla con agua y se bombea a pozos subterráneos profundos, donde en el transcurso de unos años se convertirá en piedra, eliminándolo efectivamente de la circulación en la atmósfera.
¡Genial!, ¿no crees?
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