Ahora los pájaros cantan con más libertad gracias al confinamiento por la pandemia

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Ahora los pájaros cantan con más libertad gracias al confinamiento por la pandemia

Debido al confinamiento, las ciudades bajaron su ruido urbano. Y así, los pájaros de la bahía de San Francisco, California, cantan con más libertad.

Las carreteras se cerraron, las calles se vaciaron, y los pájaros de todo el mundo cantan de nuevo. ¿Por qué? Porque en marzo y abril pasado, debido a la pandemia de Covid-19, todos nos encerramos en nuestros hogares y las aves se sintieron libres ante tanto silencio.

Esto se comprobó en Bay Area, en San Francisco, Estados Unidos. Los habitanes de la zona reportaban que escuchaban la presencia de más pájaros, y que su canto resultaba distinto. Ante esto, Jennifer Phillips, investigadora de Cal Poly, y Elizabeth Derryberry, profesora de la Universidad de Tennessee, en Knoxville, colaboraron para evaluar si este fenómeno se trataba de una respuesta ante la disminución del tráfico.

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¿Cómo se dieron cuenta los científicos que los pájaros cantan diferente por la pandemia?

Las investigadoras hicieron un comparativo de las canciones que el gorrión de corona blanca cantaba antes y después del confinamiento. Para ello, Phillips estudió el canto del gorrión de corona blanca en el Área de la Bahía, mismo que había grabado de 2013 a 2017 como parte de sus estudios.

“Me di cuenta de que teníamos la oportunidad de ver cómo los cambios en el comportamiento humano podrían afectar a la vida silvestre. ¿Qué podría significar la reducción de ruido para el pájaro cantor que estudiamos?”, expresó Derryberry.

Ambas científicas descubrieron que, durante la cuarentena, las aves respondieron con cantos más suaves que podrían viajar a una distancia mayor, sin obstáculos por el ruido. Además, cantaron en un espectro de notas más amplio.

Durante el cierre de San Francisco, fue notorio para toda la población de la zona que el ruido urbano disminuyó gracias a que hubo menos tráfico de coches. De hecho, el tráfico en el puente Golden Gate volvió a niveles de sonido no vistos desde 1954.

Quizá las aves necesitaban un descanso de nosotros

De acuerdo con Phillips, antes del confinamiento, los territorios que suelen estar poblados por aves en San Francisco tenían casi tres veces más ruido humano. Sin embargo, durante la pandemia, la gente pudo escuchar cuatro veces más pájaros de lo habitual.

“Cuando las aves no tienen que competir con el ruido de fondo fuerte, esencialmente pueden cantar más silenciosamente pero aun así comunicarse a mayores distancias”, dijo Phillips.

El estudio de la investigación fue publicado en la revista Science. También encontró que durante el confinamiento, los cantos de los gorriones machos cubrieron una gama más amplia de tonos. Por lo tanto, pudieron transmitir mayor cantidad de información para que las hembras la utilicen en la selección de una pareja.

Así que quizá si guardáramos más silencio permitiríamos que la naturaleza se comunicara mucho mejor. Y no tendría que haber una pandemia para darnos cuenta de ello.

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