Para producir un aguacate se necesitan 320 litros de agua. ¿Y si buscáramos alternativas a los aguacates más sustentables?
La popularidad global del aguacate ha provocado una explotación histórica de las zonas aguacateras, lo que ha llevado al aguacate al borde de la extinción. Pero recientemente han surgido algunas alternativas a los aguacates que buscan revertir este problema ambiental.
Sin duda, hay millones de guacalovers allá afuera, pero no todos saben que la alta demanda está causando un enorme daño ambiental. Y es por eso que algunos chefs se están organizando para crear alternativas al aguacate, principalmente al guacamole.
Thomasina Miers, cofundadora de la cadena de restaurantes mexicanos Wahaca, es una de las chefs que encabeza este nuevo movimiento. Y lo que intenta es buscar alternativas a los aguacates, tan sobre explotados hoy en día.
“El aguacate tiene tan alta demanda que se está volviendo inasequible para las personas indígenas en las áreas en las que se producen“, señaló Thomasina en una entrevista a The Guardian.
Para ello, la cadena Wahaca está creando unos nuevos dips que traten de emular su sabor y la experiencia única de su tradición. Y la ideas es hacer “guacamole sin aguacate”, al que han llamado ‘wahacamole’.
Otro chef mexicano, Aldo Camarena, también creó una alternativa de guacamole usando pasta de semillas de calabaza y calabacín. ¿A qué sabe? Quienes ya lo han probado aseguran que el sabor puede ser bastante similar al que se elabora con aguacate. ¿Será?
Urgen alternativas a los aguacates
Desde que comenzó el furor por el aguacate, a este fruto mexicano comenzó a llamársele “oro verde”. Debido al valor que ha ganado esta fruta en el mercado.
Esto no sólo ha provocado la sobrexplotación y deforestación de las zonas aguacateras, sino que también ha atraído a grupos criminales, que se disputan el poder de estos bosques a base de violencia.
Un reportaje de la revista Business Insider señaló que hay grupos que se están alejando de las drogas para enfocarse en los campos de aguacate para redirigir el producto a sus propias rutas, yendo principalmente a Estados Unidos.
En 2018, el restaurantero JP McMahon llamó a los aguacates “los diamantes de sangre de México”, siendo esta la razón principal por la que dejó de comprar este fruto y de usarlo en sus recetas, buscando alternativas a los aguacates.
Esto representa un despertar en la industria, de personas que se dan cuenta del daño que se está provocando en las localidades donde se origina el aguacate. Además del impacto que puede tener al planeta.
Su producción representa una enorme emisión de carbono y se requieren 320 litros de agua para que cada uno crezca. Asimismo, provocan problemas de deforestación, pérdida de biodiversidad y uso desmedido de agua.
Con esta búsqueda de alternativa a los aguacates, se espera reducir el impacto que tiene el comercio del aguacate y regresarlo a las comunidades agricultoras, quienes a veces no pueden ni comprar el producto que producen debido a los altos precios del mercado.
¿Estarías dispuesto a probar algunas alternativas de aguacates con tal de crear una agricultura más sostenible?
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