Una familia australiana productora de manzanas inventó una nueva bebida utilizando las manzanas rechazadas por los supermercados.
Dicen que siempre hay un roto para un descosido. Y pues sí, esto aplica hasta para las manzanas que las personas deciden no comprar en sus visitas al supermercado. Ahora, una familia originaria de Queensland, Australia, creó una bebida supernutritiva para agregar valor a las piezas que todo mundo rechazó.
Los creadores aseguran que se trata de una bebida 100% de manzana, desde la cáscara hasta el hueso. Invirtieron más de un millón de dólares y tres años de investigación para conseguir desarrollar que tanto la piel como la pulpa adquieran una forma líquida comercialmente aceptable.
No es un jugo y tampoco un néctar. Upple se presenta como un bocadillo abundante y una bebida saludable. “Cuando se hace jugo de una manzana, se desechan las partes realmente nutritivas […] la cáscara y la pulpa que es fibra”, explicó la consultora de marca y líder del proyecto Deb Loosely.
“El desafío era, ¿cómo podríamos tomar una manzana entera y agregarle valor de una manera que conserva toda la bondad de la manzana?”. La familia Savio decidió agregar valor para compensar la disminución constante en los ingresos de las manzanas.
Manzanas imperfectas y rechazadas: ahora tienen un futuro
Ahora en los supermercados la fruta con pequeñas imperfecciones que era lo suficientemente buena para su venta hace 10 o 20 años, es rechazada. “Cualquier cosa que esté un poco fuera de lugar se reduce básicamente a precio de jugo, y el precio del jugo no es viable para que estemos en el negocio”, dicen los Savio.
Sin embargo, llegar hasta el producto que tienen hoy no fue sencillo, su idea principal era que su bebida tenía que saber a manzana fresca. “Probablemente el mayor desafío fue encontrar una manera de reducir la viscosidad, el grosor del producto, a un nivel agradable de beber”.
Fue gracias a la ayuda de la Universidad de Queensland, que lograron medir las partículas de fibra de manzana para que no se notaran en la boca. Luego de dos años de intentos lo han logrado. Esperan que Upple anime a las personas a aumentar su consumo de fruta. Esta bebida de manzanas rechazadas reduce el desperdicio y salva a muchas manzanas de un destino de bajo valor.
“Atrae a los padres porque a menudo les resulta díficil llevar fruta con ellos cuando están fuera de casa. También a la gente entre los 18 y 40 años que son más conscientes de consumir bocadillos nutritivos y saludables”, dicen los creadores de esta bebida de manzanas rechazadas. Esperan que las ventas superen las expectativas de embotellado piloto y planean construir una fábrica en su granja para llegar a más lugares.