Quienes adoran los hoteles sustentables están de suerte. El próximo miércoles abre Casona Sforza un lugar idílico con vistas panorámicas al mar
La conciencia creciente de los destinos sustentables está trazando un nuevo turismo que abunda en opciones, donde los hoteles se funden con la naturaleza. Espacios donde se respeta la arquitectura local y las construcciones, son pretexto para escabullirse con el entorno. Así es Casona Sforza, un hotel boutique que se adapta al paisaje de La Barra de Colotepec, de frente al horizonte de arenas doradas de la costa del Pacífico, en la zona de Puerto Escondido, Oaxaca.
Un hospedaje con una arquitectura de inspiración vernácula y una experiencia de lujo sostenible.
Casona Sforza mantiene en todo momento su compromiso con el cuidado ambiental, la revaloración de las raíces y el desarrollo de la comunidad local.
Ezequiel Ayarza Sforza es el cerebro y corazón detrás de este proyecto y que se ha hecho posible gracias al arquitecto mexicano Alberto Kalach, que concibió la propiedad como un conjunto de volúmenes y asimetrías de trazos limpios.
Una edificación sencilla que se integra con el paisaje, sin artificios. Los arcos y las bóvedas de la construcción son un guiño de las técnicas milenarias usadas en la zona.
En este enclave privilegiado de la costa oaxaqueña, donde el delta del río Colotepec se une con el mar, la naturaleza es uno de sus mayores atractivos. Abundan los sabinos, los mangles, los tules y los robles, que invitan a una comunión con lo esencial y la belleza.
El hotel es muy luminoso y en esto tienen que ver las tonalidades arena de sus muros, que dan un ambiente muy cálido cuando son bañados por el sol. Un gran corredor lleva hasta una terraza y alberca de formas concéntricas.
Sus 11 suites abovedadas recrean atmósferas acogedoras con una estética bohemia. En todos los espacios predominan los colores neutros, maderas tropicales y texturas naturales. Además las vistas son espectaculares abiertas al mar. El interiorismo ha estado a cargo de Ezequiel Ayarza Sforza y MOB Studio.
Interiorismo con sello mexicano
Por supuesto, todo se encuentra en armonía con la riqueza local. En el diseño, los ambientes interiores se han decorado gracias a los artesanos de la zona. Así el viajero puede reconocer tapetes de Teotitlán del Valle, textiles del Valle de Oaxaca, hamacas, sillas y cortinas de Yucatán y lámparas de palma de Veracruz.
Todo se combina con elementos decorativos y amenidades de la sierra oaxaqueña, elaborados por alfareros, ceramistas, ebanistas, agricultores, yapicultores y en los talleres de Pueblo del Sol, un proyecto de producción sostenible, cuya continuidad es posible gracias a las contribuciones y al amparo de Casona Sforza.
From farm to table
La responsabilidad ecológica y social también permea a la propuesta gastronómica de este hotel boutique. Y sigue al pie de la letra el concepto farm to table (de la granja a la mesa). De esta manera, los ingredientes de cada platillo provienen de huertos de productores locales que respetan los ciclos de cosecha estacionales y no intensivos.
Asimismo, los huéspedes podrán acceder a un abanico de actividades que incluye sesiones privadas de yoga, masajes holísticos y lecciones privadas de surf. También pueden disfrutar del entorno con excursiones para ver el avistamiento de delfines y ballenas, la liberación de tortugas marinas y distintas caminatas y/o expediciones.
Si deseas escaparte a un lugar cómodo, en donde te harán sentir como en casa y además se preocupan por la naturaleza, el medio ambiente y su comunidad local, puedes empezar a hacer tu reserva.
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