A punto de estrenar la segunda parte de Shazam, Zachary Levi se sincera con sus fans y nos cuenta cómo logró superar sus problemas de salud mental.
Zachary Levi, el protagonista de Shazam: La furia de los dioses, reveló que hace 5 años sufrió un intenso colapso mental, en el que incluso pensó en terminar con su vida. A pesar de encontrarse en la cima de su carrera profesional algo no iba bien con Zachary. Él lo sabía, pero no tenía la menor idea de cómo superarlo.
El actor, de 41 años, confesó que ha luchado con la ansiedad y la depresión durante la mayor parte de su vida, pero no se daba cuenta de la magnitud de sus problemas hasta que tocó fondo. Sin embargo, todo comenzó a cambiar cuando decidió ir a terapia. De hecho, como bien dice Zachary Levi, tomar tratamiento psicológico le salvó la vida.
“He luchado contra la depresión durante muchos años. No me di cuenta de que era algo que me afectaba demasiado hasta que cumplí 37, y sufrí un colapso mental completo”, explica Levi.
Un ataque de pánico lo llevó a terapia
Durante la conversación, recordó que le costaba concentrarse en las tareas ordinarias, como desempacar e incluso ubicarse en un lugar para comer. Todo esto le provocó un ataque de pánico mientras estaba en su coche.
“Manejé sin rumbo fijo probablemente durante 10 minutos sin saber en qué lugar detenerme a comer. No sabía cuál era el lugar correcto para comer y eso me causó una gran ansiedad”.
Zachary estaba sentado en su camioneta, sosteniendo el volante, temblando y moviéndose de un lado a otro. De pronto comenzó a llorar sin razón alguna, se detuvo y pidió a Dios que lo ayudara. Fue así como el protagonista de Shazam se dio cuenta de que necesitaba apoyo profesional urgente.
“Yo no tenía una estructura de apoyo. En muchos momentos de mi vida me sentía solo y escuchaba esas voces oscuras que me decían que nunca iba a salir de esta situación”.
La oración y la meditación fueron fundamentales
Y continúa: “Por sugerencia de un querido amigo busqué tratamiento en una sala de psiquiatría, en la que pasé tres semanas en terapia intensiva. Esta decisión me salvó la vida”.
Pero meses antes, el actor de Shazam trataba de evitar sus problemas de salud mental manteniendo una dieta sana, haciendo mucho ejercicio y rezando. Estos hábitos realmente le ayudaron durante ese difícil periodo.
“La oración y la meditación son muy importantes, hasta podría decir que son curativas. Para mí, ambos son sinónimos. A veces mi oración es meditación. Así es como sanaba mis pensamientos suicidas. Me la pasaba rezando y sabía que Dios se ocuparía del resto”, finaliza.
Actualmente Zachary Levi vive feliz en Austin, Texas, y ya se prepara para el estreno de la segunda parte de Shazam. ¡Bien por él!
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