Esta iniciativa de la UNAM ¡pretende salvar a los colibríes del cambio climático!

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Esta iniciativa de la UNAM ¡pretende salvar a los colibríes del cambio climático!

Salvar a los colibríes es necesario pues son las únicas aves que polinizan las flores, al igual que las abejas. Y este proyecto es justo lo que busca.

Para los mayas, encontrarse con uno significa que alguien está pensando en ti de buena forma. Y para los mexicas, eran seres mensajeros que nos conectaban con los dioses. Hablamos de los colibríes, a quienes debemos salvar, también, del cambio climático.

También hay quienes cursimente creemos que ver un colibrí significa que va a llegar el amor a nuestra vida. O, de manera más emotiva, que los colibríes son mensajeros de las personas que ya no están entre nosotros, que nos vienen a avisar que “están bien”.

Se les conocen además como quindes, tucusitos, chuparrosas, chupamirtos, picaflor o huitzitzilin. Pero como los llames, es innegable que los colibríes son animales hermosos. De hecho, son las únicas aves polinizadoras, y lo más bonito es que son endémicas de México.

Salvar a los colibríes: un proyecto nacional

El cambio climático ha afectado a los animales encargados de polinizar las plantas. Ya te hemos hablado muchísimo, por ejemplo, de las abejas, que suelen ser víctimas de lo anterior y además, del uso de fertilizantes tóxicos que ponen en riesgo su vida. Y lo mismo ocurre con los colibríes, a los que debemos salvar a toda costa.

Tan solo en México hay 58 especies de colibríes, y estos ayudan a polinizar alrededor de 1300 especies silvestres que nos alimentan y nos dan oxígeno.

Con esto en mente, la UNAM generó en 2014 el proyecto “Jardines Urbanos para Colibríes”. Su intención es desarrollar jardines urbanos con plantas que a estas aves les gusten; como mirtos, lavandas y aretillos.

Estas áreas verdes ayudan a salvar a los colibríes al ser un oasis que los invita al descanso, a beber agua y comer. ¡Todo un paraíso hasta para nosotros!

El primer jardín se ubica en la FES Iztacala, y tras el éxito, estudiantes instalaron otros más en los institutos de Educación Media Superior (IEMS) Iztapalapa, Iztacalco, Tlalpan y Milpa Alta.

El primer jardín inició con 200 plantas en un área de 5 metros de ancho por 10 de largo. Seis años después se han expandido a 5 metros más de largo, y tienen 200 plantas más. En el último registro ubicaron 10 nidos.

¿Quieres ayudar a estas aves desde tu hogar?

Si tú también quieres salvar a los colibríes, puedes hacerlo desde tu casa, con unas cuantas macetas con sus flores preferidas en tu terraza, jardín, balcón o incluso ventana: lavanda, salvias rojas y largas, aretillos fucsia, crasuláceas y agaves echeverias. Además, puedes colocar un recipiente con agua de 10 centímetros de profundidad para que estas aves puedan pasar a echarse un baño.

En zonas urbanas puedes colocar un bebedero de néctar. Este equivale al néctar de 2,500 flores. ¡Nada mal! Debe ser de vidrio y cambiar el néctar (agua con azúcar) cada tres días.

Sin embargo, no debes colocar uno si vives cerca de zonas naturales; esto porque dichos artefactos podrían modificar su forma biológica de conseguirlo y distraerlos de su labor en la naturaleza, que es polinizar.

Con estas acciones tú también puedes salvar a los colibríes y alargar su vida, pues pueden llegar hasta los ¡10 años de edad!

Aprende más sobre los jardínes que existen actualmente para estos increíbles seres aquí.

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